Los accionistas de Aena aumentan sus dividendos pese a los conflictos con los trabajadores

La póxima Junta General de Accionistas de Aena pretende acordar la distribución de un dividendo de 6,5 euros brutos por acción con cargo al resultado del ejercicio 2017. Este dividendo, que supone distribuir el 80% del beneficio neto, representa un incremento del 69,7% respecto al ejercicio anterior, en total 1.000 millones de euros.

El problema radica, según ha informado la CGT, que estos accionistas no sólo son "en su inmensa mayoría fondos buitre extranjeros y los bancos de negocio que provocaron la crisis", sino que además, "no aportaron ni capital ni gestión a la empresa, por lo tanto ese capital nunca se utilizó para inversiones de futuro en infraestructuras de la red aeroportuaria; simplemente fue a parar a Enaire". Lamentan desde el sindicato.

Y es que desde la entrada de capital privado y tal y como recoge el Defensor del Pueblo “la privatización de Aena ha traído como consecuencia ciertos cambios en la gestión de los aeropuertos españoles, pues la empresa pública ha adoptado decisiones orientadas a aumentar sus ingresos en la gestión del espacio aeroportuario; algunas de esas decisiones han provocado el malestar de los ciudadanos", pero que también ha repercutido en los trabajadores de los aeropuertos.

Los datos son muy claros, tal y como expone la CGT, "los accionistas tendrán una retribución un 15% superior a lo que suponen todos los gastos de personal, incluidos todos los conceptos. Tras 10 años de congelación se aprobó una subida del 1% de promedio, siguiendo congelada parte de la masa salarial como son las inexistentes aportaciones al plan de pensiones".

Por si esto no fuera suficiente, cada vez se ha precarizado mucho más la situación de los trabajadores del aeropuerto, se ha externalizado la contratación de personal y eso imposibilita a Aena ha tener un control de la situación laboral de las personas que trabajan en sus instalaciones. Y las pruebas son claras: la renovación del expediente de Chaquetas Verdes, los de los servicios de seguridad de El Prat y de Barajas, la situación de los trabajadores de restauración del aeropuerto de Barcelna (en huelga indefinida desde el 24 de abril), el paro de los vigilantes de seguridad también en El Prat, la dilación de años en los nuevos expedientes de handling de las compañías aéreas y un largo etcétera.

La CGT también recuerda el tipo de contratación de los trabajadores en los aeropuertos de Aena, "contratos de un día, pérdida del derecho a las vacaciones o a cualquier posibilidad de organizar su vida personal o familiar, imposibilidad del derecho a la promoción y otras tantas son el día a día para cientos de trabajadores de una empresa con beneficios espectaculares" denuncian.

Ante esta situación de privatización de la empresa, de precarización laboral y de reparto de dividendos, el sindicato ya ha convocado una concentración en la T4 de Madrid para el próximo día 10, en el que se convoca la junta de Aena, y ha mandado al Gobierno y a los diferentes grupos parlamentarios una carta explicando la situación y pidiendo explicaciones sobre la aprobación de esta subida de dividendos hasta el 80%.