Iberia convoca una nueva huelga para este verano en el aeropuerto de El Prat

El aeropuerto de El Prat volverá a tener un verano movido. A la huelga anunciada por los tripulantes de cabina de Ryanair, ahora, el comité de empresa de Iberia Barcelona, donde el sindicato mayoritario es UGT, ha registrado una convocatoria de huelga para los días 27 y 28 de julio y los días 3 y 4 de agosto. Esto supone que durante cuatro días seguidos, del 24 al 28 de agosto, el aeropuerto de Barcelona sufrirá las consecuencias de la huelga de Ryanair, los dos primeros días, y la del personal de tierra de Iberia, los dos últimos.

Los trabajadores han decidido convocar la huelga, aseguran, por "la falta de diálogo con la dirección de la empresa con respecto a la situación de sobrecarga de trabajo de la plantilla", formada por unas 2.000 personas. Desde UGT lamentan "la falta de personal suficiente para cubrir las necesidades reales y los incumplimientos sistemáticos con los acuerdos alcanzados con la parte social".

Los trabajadores del hub de Barcelona, uno de los más importantes del IAG -holding de la fusión de las compañías Iberia y British Airways- al Estado, llevan tiempo esperando un plan industrial para el aeropuerto de El Prat donde se contemple la contratación necesaria que solucione la "sobrecarga de trabajo a que está sometida la plantilla de Barcelona" y los diferentes problemas de esta escala. Todo ello, denuncian, "con la negociación del convenio colectivo de los trabajadores de tierra parada".

El sindicato hace hincapié en, los que que llaman, los principales problemas: la falta de contratación estable, la necesidad de incrementar la plantilla eventual ("que ya es del 40%"), el uso indiscriminado de la figura de las horas perentorias -horas extra de obligado cumplimiento- y la necesidad de adquirir un compromiso de la disminución de días de presencia para la próxima temporada, tal y como permite el convenio colectivo vigente, entre otros.

UGT recuerda que "los trabajadores sólo han recibido negativas" de forma sistemática por parte de la dirección a la hora de abordar estos problemas que repercuten en el buen funcionamiento de la operativa y en las relaciones laborales en aquesa aeropuerto, así como en el trato que reciben los clientes y los pasajeros.

Esta situación se "agrava" durante la época de verano en Barcelona, cuando hay pleno crecimiento de las operaciones de Vueling -compañía del grupo IAG- donde la plantilla está saturada para poder ofrecer el servicio.