Hasta ahora, las cámaras instaladas en la ETAP de Aigües de Barcelona estaban conectadas entre sí por redes fijas convencionales, de manera que las imágenes captadas se enviaban a un servidor local ubicado dentro de la instalación. Gracias a este proyecto, las imágenes recogidas por las cámaras de seguridad se envían con 5G al edge computing y se procesan en la nube mediante algoritmos de Inteligencia Artificial (IA).