Viladecans inaugura el nuevo curso con cortes de tráfico

Imagen de como quedará la calle Balletbó

Este lunes 3 de septiembre la mayoría de personas vuelven de nuevo al trabajo. El tráfico de las ciudades se vuelve a intensificar y vuelven, entonces, los embotellamientos. Con este más que previsible panorama, Viladecans ha decidido iniciar una serie de obras, justo en esta fecha, que provocará cortes en varias calles que pueden complicar la circulación.

Varias calles del Barrio de la Montserratina, Barrio antiguo y Barrio de Sales ponen en marcha la próxima semana obras de reforma integral. Las intervenciones, de duraciones previstas entre los 6 y los 7 meses, se realizarán de manera progresiva y por fases, dice el ayuntamiento "para minimizar el impacto de los cortes de tráfico derivados de las actuaciones en los barrios", aunque en estas fechas puede resultar difícil.

Tras la peatonalización de la plaza de las Palmeras, la reforma integral de la calle Doctor Reig, en los tramos comprendidos entre las calles Salvador Baroné y Carles Altés, culminará el eje peatonal generado desde esta plaza hasta la de la Constitución, uno de los ejes de la ciudad que va a sufrir las consecuencis de las obras.

El primer tramo afectado será el de la calle Doctor Auguet y Carles Altés. Al finalizar se procederá a iniciar la fase 2, en el tramo entre la calle Salvador Baroné y Carles Altés. Ambos tramos se cortarán de forma definitiva a la circulación de vehículos. Durante el total del desarrollo del proyecto, se producirán desvíos puntuales y de corta duración, aseguran desde el consistorio de Viladecans, motivados por la intervención en los cruces.

Proyección del futuro Doctor Reig.

La obra, que durará seis meses, será la última que se financie con los fondos de la Ley de Barrios de Montserratina.

En el barrio antiguo comenzará la intervención en la calle de Joan Balletbó. Las obras, de unos seis meses de duración, supondrán la renovación de los servicios urbanos. La calle obtendrá un tratamiento superficial que dará más espacio al peatón, eliminando el espacio destinado actualmente en el aparcamiento, que es casi residual (unas 5 plazas legales entre vados) y generando una plataforma única, en la que se mantendrá un espacio central de paso para los vehículos. Además, la calle lucirá nuevo alumbrado, mobiliario urbano (que muchos esperan que no tengan nada que ver con los famosos bancos rojos)  y arbolado.

"Las obras se realizarán en dos fases para intentar minimizar las molestias a los vecinos de la misma calle", vuelven a insistir desde el ayuntamiento. Durante estas, la calle quedará totalmente cortada al paso de vehículos y sólo se podrá acceder a los vados en caso de que sea posible.

Las calles de Jaume Balmes, Rafael Casanova, Joan Fivaller y carretera del Prat comenzarán a reformarse a partir del 3 de septiembre, pero no será hasta el día 12 del mismo mes que se producirán los primeros cortes en la carretera del Prat entre Jaume I y Wifredo el Velloso; y Joan Fivaller entre Antonio Machado y carretera del Prat. Es decir, el día de la vuelta al cole, lo que puede agravar la problemática. Durante el mes de agosto ya se han podido observar en las vías pequeños trabajos previos necesarios para la ejecución de la obra. Los días 31 de agosto y 3 de septiembre, además, habrá cortes puntuales en las calzadas como resultado de un trabajo de supervisión del estado de los colectores.

La intervención supondrá la renovación total de las calles del Barrio de Sales, que se inició en 2005 con la renovación de la calle de Catalunya y los transversales desde paseo de la Marina en carretera del Prat en el marco del Plan Especial de Mejora Urbana (PEMU). La reforma permitirá una reordenación de los espacios destinados a coches y personas, dotando a estos últimos de más espacio. Del mismo modo, también se instalará un nuevo alumbrado, nuevo mobiliario y nuevos árboles.

Seguramente todas estas mejoras harán más caminable la ciudad, más libre de coches y beneficiará la calidad del aire, algo realmente importante en Viladecans, el problema recae en que la fecha de inicio de estas obras, muy próximas a las elecciones municipales, puede complicar la vuelta al trabajo y más adelante la famosa vuelta al cole.