El Hospital de Viladecans utiliza un 25% menos de sangre en sus operaciones respecto a la media
El ahorro sanguíneo permite la pronta recuperación de los pacientes, reduce la mortalidad y las complicaciones, además de optimizar el uso de la sangre.
El Hospital de Viladecans utiliza un 25% menos de sangre en sus operaciones. De este modo, por las características de los procedimientos quirúrgicos programados que realiza, sería normal hacer uso de más sangre y, con dicha disminución, permite que los pacientes se recuperen más rápido, reduce la mortalidad y las complicaciones, además de optimizar el uso de la sangre.
Hace años que el centro viladecanense apuesta por racionalizar el uso de los componentes sanguíneos en sus intervenciones quirúrgicas y por ello ha adoptado las recomendaciones del modelo de gestión de la sangre de los pacientes (Patient Blood Management, con la sigla PBM), que pretende evitar la transfusión innecesaria durante las intervenciones quirúrgicas y mejorar la evolución clínica de las personas operadas.
Hay estudios que afirman que más de la mitad de las transfusiones de sangre que se hacen en los hospitales son evitables.
OPTIMIZAR EL VOLUMEN SANGUÍNEO EN QUIRÓFANO
El modelo PBM se basa en la optimización del volumen sanguíneo que se utiliza en el quirófano, la minimización de las hemorragias y la optimización de la tolerancia a la anemia.
Desde 2011, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda a las organizaciones sanitarias adoptar el modelo PBM y desde el 2017 lo hace la Unión Europea.
El año 2018, el 9,1% de los pacientes que fueron sometidos a cirugía de prótesis de cadera o de rodilla, o de cáncer de colon y recto en el Hospital de Viladecans recibieron una transfusión de sangre, mientras que la cifra global esperada era del 12,1%.
En el caso de las intervenciones para la colocación de una prótesis de cadera, el porcentaje fue del 13% (frente al 15,8 % esperado); en la implantación de una prótesis de rodilla, del 8% (10,3% esperado); en la cirugía abierta de cáncer colorrectal, del 9,1% (17,7% esperado), y en las operaciones con laparoscopia de cáncer colorrectal, del 8% (14,7% esperado).
Los pacientes intervenidos de estos procesos permanecieron ingresados dentro del hospital 3,27 días de media, frente a los 6,76 días esperados, lo que representa un 52 % menos. En total, se redujo el número de complicaciones esperadas en un 72 %.
Escribe tu comentario