Sant Vicenç trata de pacificar el barrio de Can Ros tras los últimos altercados

Las últimas imágenes que de peleas y altercados violentos en el barrio de Can Ros de Sant Vicenç dels Horts han llevado al ayuntamiento a actuar de manera urgente. Tanto es así que el consistorio ha aprobado en junta de gobierno dar luz verde a un nuevo proyecto de intervención directa en el barrio.

El objetivo de este plan de actuación es resolver las dificultades de convivencia vecinal que se vive en concreto en la calle Llobregat, en el tramo conocido como la rambla de Can Ros. El proyecto consiste en organizar un proceso en el que la ciudadanía y la administración trabajen conjuntamente para identificar las causas de lo que está pasando y explorar las diferentes medidas de prevención y promoción del uso positivo del espacio público que se deben poner en marcha.

El abandono de esta zona del municipio durante largo tiempo y tantos gobiernos han provocado situaciones de conflicto en el barrio, por eso, ahora, con este plan se pretende reconducir la situación actual de tensión, reforzar el papel de la Rambla como espacio de dinamización vecinal, responder y prevenir discursos y rumores falsos, y favorecer la corresponsabilidad del vecindario y entidades en todo el proceso. Para ello, el ayuntamiento ha anunciado que varios profesionales van a trabajar conjuntamente con entidades, vecinos y trabajadores municipales.

El alcalde de Sant Vicenç dels Horts, Miguel Comino, explicó que su voluntad es hacer del municipio una ciudad inclusiva, donde todos se sientan cómodos y para ello es necesario "garantizar un barrio cohesionado".

PUESTA EN MARCHA

El ayuntamiento ha informado que próximamente va a iniciar la recogida de información para elaborar el diagnóstico de la situación y va a crear un espacio conjunto de trabajo entre ayuntamiento, entidades y vecindario, que se podría llamar "Espacio Rambla". 

Esta intervención que se suma a otros proyectos que el ayuntamiento dice estar desarrollando en este barrio de la ciudad. Uno de ellos es el Plan de convivencia y civismo en Can Ros y El Serral, del que se está terminando la diagnosis participativa con cuerpos de seguridad, ciudadanía, entidades y profesionales. De entre las acciones que se están valorando son la contratación educadores cívicos o de la calle y la creación del Espacio para la Convivencia.

Por otra parte, también se está trabajando con el Grupo de de intervención en el espacio público, un proyecto coordinado por el departamento de Participación y Convivencia y en el que participan los cuerpos de seguridad y los servicios municipales como el Servicio de acompañamiento Joven y el Servicio de Mediación Ciudadana para intervenir en zonas concretas como la plaza Sant Jordi, la rambla de Can Ros, o la plaza Miquel Julià, entre otros.