Esplugues acuerda la nueva ordenanza de terrazas
Los establecimientos deberán mostrar el aforo permitido en un lugar visible y se limitarán los horarios de terrazas de 8 a 23 horas, de 8 a 24 los viernes y sábados y de 9 a 23 los domingos y festivos.
El Consistorio de Esplugues aprobó definitivamente la ordenanza municipal reguladora de la instalación de terrazas, veladores y otros elementos al servicio de establecimientos de restauración. La ordenanza se aprobó inicialmente en el pleno del 21 de diciembre de 2016 y, a continuación, se sometió el documento aprobado a información pública.
Las principales novedades de la norma reguladora son que los bares y restaurantes deberán mostrar en un lugar visible el aforo por el que tienen licencia, especificando el número de mesas y sillas de las terrazas que monten en el espacio público, y la limitación horaria de las terrazas.
Las alegaciones formuladas y las recomendaciones efectuadas por el Síndic de Greuges han sido objeto de valoración e informe por el que se propone la estimación de una parte de las alegaciones y la desestimación del resto. En el mismo informe se propuso la modificación del redactado de determinados artículos y disposiciones del texto de la Ordenanza aprobado inicialmente, con el fin de dar satisfacción a las alegaciones estimadas total o parcialmente.
En el transcurso del debate en el pleno, el portavoz del PSC, Eduard Sanz, hizo referencia a la complejidad de la ordenanza, en la que "hemos coincidido todos", pero que todas las normas que "se refieren a ordenar el espacio público son más complicadas, porque se producen intereses dispares, ya veces es complicado. No ha sido una resolución fácil, ha tenido trabajo, debate, se han estudiado ordenanzas de otros municipios, hemos hecho un proceso participativo y hemos hablado con los vecinos, representantes de los restauradores, los comerciantes y de la Unión de Comerciantes".
También por parte del equipo de gobierno, el portavoz del Partido Demócrata Europeo Catalán (PDeCAT), Santi Siquier, quiso incidir en que "la ordenanza que se aprueba pretende salvaguardar los intereses generales. Necesitábamos un marco normativo jurídico que diera respuesta a la ocupación de estas instalaciones en los espacios de dominio público y también en espacios privados accesibles desde el dominio público".
Julio Roldán, portavoz de Ciudadanos, ha dicho que "a la aprobación inicial votamos a favor" y se refirió "a la dificultad del debate para encontrar un justo equilibrio". Añadió que "ahora se ha hecho un recorte adicional a los horarios" y dijo que adelantar el cierre de las 12 de la noche a las 11 "nos parece excesivo".
El portavoz de ERC, Oriol Torras, dijo que "Entendemos que, a pesar de que se ha hecho bastante esfuerzo, desgraciadamente no se ha llegado a un acuerdo satisfactorio para todas las partes, aunque había posibilidades para flexibilizar la norma y conseguir que los empresarios que se dedican a la restauración en horario nocturno no fueran perjudicados por los horarios de la ordenanza. Entendemos que esto no es así, están muy perjudicados ".
El portavoz del PP, Marcos Sánchez, dijo que "es muy complicado encontrar el encaje entre la libertad de los establecimientos y el descanso de los vecinos" y dijo que las variaciones que se han hecho al texto aprobado inicialmente "han logrado desequilibrar la equilibrio que nosotros entendíamos que sí existía inicialmente, votaremos en contra ".
La portavoz de ICV, Estefania Zafra, argumentó que "en coherencia con lo que votamos en el pleno de diciembre y por los mismos motivos, volvemos a votar en contra". Anna Coll, portavoz de la CUP, expresó su abstención.
Julián Carrasco, portavoz de Cambiamos Esplugues, manifestó que "esta ordenanza siempre ha generado problemas a la ciudadanía, unos, los restauradores, porque tienen que cerrar pronto, y los otros, los vecinos, porque cierran tarde. Recoge bastante bien el espíritu que sean compatibles el ocio y el descanso. Los horarios son bastante aceptables por parte de todos. Hemos intentado buscar fórmulas para que todos estuviera contento".
La concejala no adscrita, Laura Benito, hizo referencia a la dificultad de "conciliar el descanso de los vecinos con la limitación horaria de los restauradores" y dijo que "se podrían haber estudiado diferentes fórmulas; la limitación horaria a la larga es posible que pueda ocasionar perjuicios económicos a los restauradores".
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