La renovada piscina de invierno de Olesa, en suspenso

Los vecinos de Olesa de Montserrat llevan tiempo esperando la renovación de la piscina de invierno pero ahora la inquietud se ha incrementado con la decisión del gobierno municipal de rescindir el contrato a la empresa ecargada de los trabajos por su incumplimiento de fechas de entrega.

La alcaldesa de Olesa, Pilar Puimedon, así como los concejales de Deportes y Obras y Edificación, Jordi Martínez y Miquel Riera respectivamente, aseguraron que toda la maquinaria administrativa y jurídica del Ayuntamiento está trabajando intensamente para reanudar lo más pronto posible las obras del nuevo módulo de vestuarios de la piscina cubierta municipal, con el objetivo de que, si es posible, el equipamiento se pueda abrir hacia el mes de enero todavía que los trabajos no estén terminados. Al menos, así lo han afirmado en la reunión con los usuarios de la piscina cubierta celebrada este jueves 13 de septiembre.

Los vecinos, que llenaron la sala de sesiones, estuvieron atentos a todas las explicaciones que dieron los responsables municipales y vieron como no parecía tan claro que se puediera solucionar la problemática de la piscina en las fechas indicadas.

Desde el Equipo de Gobierno se ha querido ofrecer con la ciudadanía toda la información sobre las razones de la decisión de rescindir el contrato de obras, una decisión que, afirmaron, no hubieran querido nunca tener que tomar, y que se ha vivido "desde el desazón", según ha afirmado el concejal de Deportes. Ahora bien, toma la decisión, la maquinaria municipal ha dado prioridad a este asunto para intentar reanudar las obras si es posible antes de que finalice el mes de septiembre y también está estudiando diferentes alternativas para intentar abrir el equipamiento hacia el diciembre-enero.

ALTERNATIVAS

En este sentido, Martínez y Riera han explicado que con la nueva empresa que sea contratada estudiarán dos posibilidades: que se instale primero toda la maquinaria que permite el funcionamiento de la piscina para que ésta pueda funcionar mientras se hacen los nuevos vestuarios (con vestuarios en módulos prefabricados); o bien, si no es posible hacer primero esta actuación, contratar los módulos de vestuarios y la maquinaria instalando todo de manera provisional en el exterior. Será la primera de las cuestiones que se ligará con la nueva empresa adjudicataria, con quien también se quiere establecer una temporalización ajustada de la consecución de los trabajos que quedan por hacer.

En cuanto a la rescisión del contrato, desde el Equipo de Gobierno ha admitido que supone una contrariedad para el ayuntamiento, para que la duración prevista de las obras ya era ajustada para intentar afectar lo menos posible a las usuarias.

Según ha explicado el concejal de Obras y Edificación, Miquel Riera, el proyecto determina que el nuevo módulo de vestuarios tenía que hacer con unos módulos prefabricados que se tenían que encargar con tiempo suficiente para poder cumplir los plazos. En julio la empresa constructora entregó una documentación en el Ayuntamiento conforme había encargado estos módulos prefabricados, pero los Servicios Técnicos pudieron comprobar que el encargo no se había formalizado. Por esta razón el mes de agosto los Servicios Jurídicos del ayuntamiento iniciaron el procedimiento para la rescisión del contrato.

A raíz las preguntas de algunos usuarios sobre el proceso de adjudicación de las obras, el concejal Miquel Riera aseguró que la empresa C.J.R. S.L. cumplía todos los requisitos técnicos y económicos exigibles según la Ley de contratos, y además, fue la que presentó mejor oferta. En este sentido, la alcaldesa insistióque la adjudicación se hizo "siguiendo toda la normativa legal", al igual que se ha seguido ahora por rescindir el contrato de forma unilateral. La rescisión lleva de la mano el procedimiento jurídico para retener la garantía depositada por la empresa, y en su caso, reclamar daños y perjuicios.

Paralelamente, el ayuntamiento ha avanzado contactos con el resto de empresas que se presentaron al concurso para que, una vez se pueda adjudicar de nuevo, la nueva empresa responsable de las obras ya tenga todo previsto para iniciar los trabajos a un buen ritmo desde el primer día. Miquel Riera ha detallado que, una vez se puedan reanudar los trabajos, la duración de las obras sería de unos seis meses. Por lo tanto, se quiere intentar ver si es posible compaginar las obras con el uso de la piscina a partir del diciembre-enero. Hoy por hoy, sin embargo, no se puede precisar si será posible optar por alguna de las dos alternativas planteadas.

DEVOLUCIÓN DE CUOTAS

A la vez, el ayuntamiento de Olesa también está tramitando el retorno de las cuotas de los últimos meses a los usuarios de la piscina cubierta. De los 280 abonos que tenía la piscina cubierta, el retorno de 137 ya se está tramitando (los que lo solicitaron) y al resto se les está llamando para gestionar el retorno. Para estos casos, la semana del 17 al 28 de septiembre personal del departamento de Deportes atenderá a la OAC las solicitudes de retorno en el siguiente horario: de lunes a viernes, de 8.30 a 14.00 hy martes y jueves también de 16.00 a 19.00 horas.

ACTIVIDADES ESCOLARES

Próximamente también se convocará una reunión con los centros educativos que hacen actividad en la piscina cubierta para buscar posibles alternativas. La alcaldesa también ha asegurado que, en cuanto se tenga información más concreta sobre la empresa que continuará las obras y el Planning de trabajo, así como de la alternativa escogida para intentar abrir el equipamiento, se volverá a convocar a los usuarios y usuarias para informarles.

Precisamente, algunos asistentes al acto han preguntado sobre la posibilidad de que el ayuntamiento llegue a un acuerdo con otros ayuntamientos para poder hacer uso de piscinas cubiertas vecinas a un precio especial e incluso de montar un sistema de transporte para facilitar el acceso a estos equipamientos a las personas que no disponen de vehículo privado.

En este sentido, si bien llegar a acuerdos sobre precios se ve difícil, el consistorio no ha descartado que, si hay suficiente demanda, se pueda organizar desde el ayuntamiento un sistema de transporte.