Sigue la guerra interna en Avanza. Trabajadores de la compañía a través de las redes sociales y mediante una carta han querido explicar a la redacción de Vilapress  la situación interna actual que se vive con los representantes sindicales de su Comité de empresa.  A las desavenencias entre empresa y sindicatos, ahora se une la guerra interna entre los representantes sindicales y los trabajadores. 

Según explican los trabajadores , CCOO y UGT, en el "preacuerdo alcanzado entre los sindicalistas y la empresa Avanza, no se tiene en cuenta al trabajador, "la empresa ofrece 3% de subida salarial y reducir 11 horas anuales". La mayoría del comité vota a favor de esta propuesta, pese a que "la oferta está muy lejos de las exigencias de la plantilla".

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Tras el "preacuerdo" alcanzado y que avanzó Vilapress se denuncia que "la empresa manda un directivo a repartir octavillas con la propuesta de la empresa entre la plantilla." De ahí que los propios trabajadores descontentos hablen de "presiones políticas, empresariales y sindicales", que no han funcionado, ya que en la votación final se decidió la semana pasada  "continuar con la huelga con 311 votos en contra y 48 votos a favor de la propuesta".

FUÉ UNA VOTACIÓN MUY POLÉMICA

Según se explican los propios trabajadores "la votación para decidir la continuidad de la huelga se hace a través de una urma, método no utilizado en ningún otro proceso de votación anterior". Esta decisión de poner urnas parece ser que partió "de los propios representantes del Comité de Empresa". La misma afirman que se hizo  "dentro de un autobús, pidiendo si o no a la propuesta de la empresa en una lista con nombres y números de conductor", por lo que quién controlaba la votación "conocía lo que ha votado cada trabajador en esta consulta con urna". Algo que generó mucho malestar entre los trabajadores de la plantilla que participaron.

LOS TRABAJADORES CREEN QUE LA EMPRESA ACTÚA A LA "DESESPERADA"

En la carta se explica que "se ve que la empresa ( AVANZA )estaba muy desesperada por cerrar la huelga". La propia compañía según afirman los trabajadores "envió un directivo a repartir octavillas diciendo "SI" al preacuerdo, "él mismo intentó votar, estando fuera de lugar pues sus condiciones no las marca el convenio".

REPRODUCCIÓN DE LA CARTA ABIERTA DE ESTE TRABAJADOR A LOS MEDIOS

Pero los trabajadores no son los únicos cansados con este situación porque los usuarios están mostrando su malestar constantemente y de multiples formas:

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Además los consistorios de Gavà, Viladecans y Castelldefels han intentado mediar en el conflicto y han reivindicado ante la AMB el pésimo servicio que reciben sus vecinos en diversas ocasiones.

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Así mismo la propia AMB reconoció las incidencias e impuso una multa a la empresa concesionaria de cerca de 300.000 euros.

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Desde el PP de Viladecans presentaron una moción de rescisión de la concesión para intentar encontrar una solución a este conflicto enquistado.

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