Tensión y violencia en un partido juvenil en Esplugues: un menor detenido y varios expulsados

Lo que debía ser una jornada más en la Primera División Juvenil (Grupo 9) acabó convirtiéndose en un episodio de tensión y violencia en el Campo Municipal Salt del Pi de Esplugues de Llobregat. El partido disputado el pasado sábado 29 de marzo entre el CFA Espluguenc y el CF Martorell quedó marcado por graves incidentes en la grada, enfrentamientos entre jugadores y la detención de un menor fuera del recinto.

Insultos racistas y tensión en la grada

El conflicto se desató tras una dura falta que dejó lesionado a un jugador del Martorell. El delegado visitante entró al campo para asistir al joven, momento en el que, según denuncia el club, recibió un comentario racista por parte de un jugador local. Esto provocó una acalorada discusión que terminó con la expulsión del delegado por parte del árbitro.

Mientras se retiraba a los vestuarios, un grupo de jóvenes en la grada se abalanzó contra la valla de separación e increpó al delegado visitante, llegando incluso a escupirle. Ante la creciente tensión, el árbitro interrumpió el partido y advirtió que si el público no se reubicaba, el encuentro sería suspendido. Finalmente, gracias a la intervención del técnico del Espluguenc y de los propios jugadores locales, la situación se calmó y el partido pudo reanudarse.

Expulsiones y agresiones al final del encuentro

Sin embargo, la violencia no cesó. En los minutos finales, los ánimos volvieron a encenderse en el terreno de juego, lo que derivó en varias expulsiones. Además, se registraron escupitajos y agresiones entre jugadores, agravando aún más la situación.

Intervención policial y un menor detenido

Siguiendo el protocolo de seguridad para estas categorías, los Mossos d’Esquadra acudieron al campo para garantizar la seguridad de jugadores y espectadores. Una vez finalizado el partido, la tensión se trasladó al exterior del recinto, donde varios jóvenes se encararon con los agentes.

Uno de ellos, en actitud desafiante, insultó a la policía y huyó del lugar, pero fue localizado minutos después en la plaza Catalunya. Allí, agredió a un sargento de los Mossos, lo que llevó a su reducción y detención por atentar contra la autoridad.

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