Núria Marquès: "Vamos a por todas en estos Juegos Paralímpicos de París"

Núria Marquès, nacida en Castellví de Rosanes en 1999, se ha consolidado como una de las figuras más emblemáticas en la natación adaptada a nivel mundial. Su trayectoria es un ejemplo inspirador de perseverancia y valentía. A pesar de haber enfrentado la amputación de una pierna a causa de una discapacidad congénita, Marquès ha convertido las adversidades en una plataforma para alcanzar la grandeza en el deporte. 

Con apenas 25 años, Marquès ya es una de las grandes estrellas del deporte paralímpico español, acumulando cuatro medallas en sus primeras dos participaciones en los Juegos Paralímpicos: una de oro, dos de plata y una de bronce. Su destacada actuación en los Juegos de Río 2016, cuando ganó una medalla de oro y una de plata a la edad de 17 años, marcó el inicio de una carrera estelar que sigue en ascenso. Ahora, la del Baix Llobregat se prepara para unos Juegos Paralímpicos de París 2024 que le permitan ampliar su palmarés, ya que es una de las opciones de medalla que tiene la delegación española. 

¿Cómo afrontas estos Juegos Olímpicos de París con estos tres años que llevas preparándolos?

Los afronto con mucha ilusión y con muchas ganas, sobre todo y principalmente también por el hecho de que están al lado de casa. Al final es París, que en un avión estamos en dos o tres horas. Poder tener a la familia y a mis amigos animándome en la piscina es algo que siempre he echado un poco de menos dentro de estas competiciones. Mis primeros juegos fueron en Río y los segundos fueron en Tokio, por lo que han sido en la otra punta del mundo.

Además, son mis terceros juegos. Veníamos de Tokio en 2021 que fueron unos juegos peculiares y muy difíciles en relación a la preparación porque se nos alargó un año más y, realmente, para estos hemos tenido tres años que creo que los hemos aprovechado muy bien. Los hemos disfrutado mucho, hemos tenido competiciones donde yo personalmente he aprendido muchas cosas que puedo utilizar a la hora de competir en París. He crecido mucho deportivamente y estoy con muchas ganas, con mucha ilusión.

Como decías, este ciclo olímpico han sido tres años y no de cuatro como es tradicional. ¿Cómo de duro es preparar unos Juegos Paralímpicos?

Al final un poco es como un trabajo, con muchas comillas. Es algo que lo he hecho toda la vida y me encanta, pero sí que es verdad que le dedicamos muchas horas. Entrenamos unas seis horas al día más o menos. No tenemos nada asegurado y cada año hay que ir renovando las becas con resultados. Es algo que tenemos que ir trabajando año a año. También son muchos días fuera de casa porque hacemos concentraciones como la que hemos hecho hace poco en Sierra Nevada de tres semanas entrenando de lunes a domingo durante esas seis horas.

Es un trabajo muy constante, de muchas horas y que no sólo hay que tener bien el cuerpo. Se trabaja el cuerpo pero también se trabaja la mente. Es algo muy importante que he aprendido mucho todos estos años y que engloba tu estilo de vida. Te estás machacando tus músculos y tu cuerpo para moldearlo y poder sacarle un provecho cada uno, dos o tres años. Llegas a casa y tienes que dormir bien, comer bien, estar psicológicamente bien y preparado para enfrentarte a lo que es la competición y a cualquier situación que se te oponga para poder estar en tu cien por cien.

Es tu estilo de vida que llevar. Hay muchos muchos factores externos, pero cuando coges una rutina ya es más fácil. Es verdad que es un deporte muy disciplinado, como la mayoría de deportes que se participan en los juegos, pero al que le tienes que dedicar prácticamente toda tu vida.

"Los objetivos son ambiciosos. Podemos hacer un muy buen papel. Hay que disfrutarlo mucho. Es como salen bien las cosas.

Fuiste a los primeros juegos a Brasil con 17 años y te llevaste un oro y una plata. Fuiste a Japón y te llevaste una plata y un bronce, ¿Cuál es el objetivo que te marcas en estos Juegos Paralímpicos de París?

Los objetivos son ambiciosos. Podemos hacer un muy buen papel. En todos los otros Juegos, igual que en este, ponerse un objetivo de medallas es muy relativo porque nunca se sabe y competimos muchas. En mi caso, personalmente, tengo cuatro rivales con las cuales estamos todas a menos de un segundo de diferencia de nuestra mejor marca.

Hay que ganar a quien mejor esté ese día. Estamos muy igualadas. Mi objetivo principal es hacer un buen papel e intentar sacar mi cien por cien allí. Es para lo que hemos estado trabajando estos tres años. Hay que disfrutarlo mucho. Es como salen bien las cosas.

Hablabas antes de la gestión mental. Después de ir a dos juegos y cuatro medallas, ¿sientes algún tipo de presión para conseguir una medalla en estos juegos?

Los objetivos anteriores se han cumplido con muy buenas expectativas, con muy buenas sensaciones y siempre se busca mejorar. Al final el deporte de élite es un poco así: siempre buscamos lo mejor de lo mejor. Obviamente, está ese gusanillo, esa pequeña presión, esos nervios de hacerlo bien e igual o parecido a los anteriores. Sería un logro. Es lo que buscamos y para lo que hemos trabajado. Vamos a por todas en estos Juegos Paralímpicos de París. Llevo muchos años dentro de este deporte, compitiendo y poco a poco se va aprendiendo a cómo gestionar esa presión y las emociones, tanto las buenas como las malas. Hay que saber relativizar todo un poco y tener la mente fría en ese sentido. Hay que ir a por todas en el momento que toque. 

En el deporte se mide mucho el éxito en función de las medallas o los triunfos que consiguen los deportistas pero no se valora por ejemplo el recorrido que habéis tenido durante estos cuatro años. ¿Crees que hay mucha injusticia en cómo se valora por parte de la gente que lo vive desde fuera? 

Al final es un poco toda una rueda. Sí que es verdad que no tenemos tanto seguimiento durante estos tres o cuatro años. También es verdad que es un deporte minoritario. Sobre todo el deporte paralímpico aún lo es más. Es complicado. Tiene que ser un poco una rueda de medios de comunicación que nos sigan. Una medalla vende mucho más que una preparación de un año para un campeonato en concreto. Al final lo que se ve es la medalla. Es verdad que buscamos un poco ese reconocimiento que es lo que nos ayuda a nosotros a mejorar en el día a día, porque cuando se te visualiza también hay marcas y empresas que se interesan más por ti y que te ayudan con recursos. Así podemos hacer concentraciones durante el año, tener una mejor preparación e incluso tener medios como un biomecánico, nutricionistas, etc. Al final son medios económicos que nos hacen falta y que gracias a que nos siga gente, se vea y empresas nos ayuden, se puede hacer. Es todo una rueda.

"Por fin se han nivelado los premios de Olímpicos y Paralímpicos este año en París. Nos da una alegría porque se nos valora ya un poco más por igual"

Hablas de los medios económicos que os pone el comité. ¿Has notado mucha diferencia en este ciclo olímpico respecto a los otros que has hecho? 

Han ido subiendo todos los medios económicos. Desde que empecé en Río todo ha subido: becas, premios, ayudas por parte de patrocinadores, etc. Todo eso sí que ha ido subiendo, y yo lo estoy notando. Tenemos la gran suerte, por así decirlo, que por fin se han nivelado los premios de Olímpicos y Paralímpicos este año en París. Eso también nos da una alegría porque se nos valora ya un poco más por igual y podemos valorarnos nosotros también en ese sentido. Nosotros nos valoramos, pero necesitamos también que la gente nos siga, nos conozca y así también se valore desde dentro y desde fuera. Es lo que poco a poco se va consiguiendo. Aún queda bastante recorrido por hacer pero vamos por el buen camino, eso seguro. 

Teniendo en cuenta que no es que vosotros hagáis menos esfuerzo para estar en los Juegos Olímpicos, sino probablemente es todo lo contrario, ¿Qué importancia precisamente le das a equiparar la cantidad de dinero que se da por un premio entre el deporte tradicional y los Juegos Paralímpicos?
 

Exacto. Al final nosotros lo que siempre reivindicamos es que por tener una discapacidad, no es menos el deporte. Y sobre todo, tampoco es muchísimo más. Al final somos deportistas todos. Entrenamos muchísimas horas al día. Podemos decir que entrenamos prácticamente lo mismo que el equipo español convencional. Es muy igualitario en ese sentido: los entrenamientos, el esfuerzo, el sacrificio y el hecho de ir allí y competir contra los mejores, que es lo que hacemos todos. Por eso también está bien que se nos reconozca por igual.

Ahora ya afrontas estos Juegos Paralímpicos con una experiencia que no tenías en Brasil. En 2016 probablemente no esperabas ni conseguir una medalla, porque con 17 años verte en unas Olimpiadas tiene que ser increíble. ¿Qué diferencias hay en cómo afrontabas los Juegos Paralímpicos anteriores a cómo los afrontas ahora?

Sí, fue una experiencia mágica para mí. La verdad es que era un poco inocente en ese sentido, porque realmente tampoco sabía muy bien dónde me estaba metiendo en ese momento. No era muy consciente de ello y me vi un poco ya adentro. Empecé a competir y salieron estos pedazos de resultados. Fue una competición increíble. Tengo un maravilloso recuerdo de Río y a lo mejor incluso fueron más difíciles los años después que no el mismo año del 2016 por gestionar todas esas medallas y lo que la gente un poco se espera de ti. Incluso lo que tú también te esperas un poco de ti. Es saberlo gestionar que el deporte va cambiando y salen nuevas competidoras. Ni siempre estarás arriba ni siempre estarás abajo. Todo puede variar. Hay que saber gestionarlo y disfrutar de la competición, que es lo que a mí siempre me ha dado alas para poder llegar a lo más alto. Disfrutar del deporte que hago ha sido en los momentos que más he rendido y es a lo que a lo que aspiro esta vez. En París puedo sacar provecho a todo el aprendizaje que llevo.

"Ni siempre estarás arriba ni siempre estarás abajo. Hay que saber gestionarlo y disfrutar de la competición, que es lo que a mí siempre me ha dado alas para poder llegar a lo más alto"

En una entrevista dijiste que ya es difícil que te pille una situación desprevenida en los Juegos Olímpicos. ¿Cómo te preparas para que cuando surja algo imprevisto durante la competición sepas afrontarlo y sobreponerte?

Al final no es que no me puedan salir imprevistos. Te puedes encontrar cualquier cosa y simplemente saberlo relativizar y tener la mente un poco en calma en esos momentos. A veces es difícil porque al final unos juegos es una competición donde se te juntan muchas emociones y experiencias nuevas. Viviendo tres, cuatro o cinco juegos a lo mejor no las has vivido. Tienes que saber que te pueden aparecer esos momentos de estrés, presión, cambios de última hora que te generen que te vaya la cabeza loca. Tienes que aceptar que puede pasar. Puedes llegar a controlarlo. Cada día es un día distinto. Yo nado muchísimas pruebas dentro de este calendario de los juegos, así que cada día es distinto y cada prueba es un mundo. No porque te haya salido mal un día te tiene que salir mal el siguiente, al contrario, puedes remontar. En 2019, en el Mundial de Londres me descalificaron en una de mis principales pruebas y luego gané medalla de oro en el 200 estilos. Es saberle dar la vuelta en ese momento, saber borrarlo o aprovechar incluso el momento de bajón para sólo mirar y tirar para arriba.

En París han sido los primeros Juegos Olímpicos paritarios. En estos Juegos Paralímpicos de París también el Comité Paralímpico Español va a llevara un récord de mujeres que van a competir, con un 36% de los deportistas. ¿Cómo importante es que también en los Juegos Paralímpicos cada vez vayan más mujeres y se les vea más y aparezcan más en los medios, que aparezcan en todos lados?

Es un paso muy importante. Se está viendo que se está haciendo en la mujer y el deporte en general. Es súper importante para nosotras, para poder enseñar al mundo que el deporte puede ser exactamente igual de emocionante viéndolo en mujeres que en hombres y que puede tener una repercusión enorme también. Es fundamental para poder enseñar que ayuda a que las niñas, cuando son más pequeñas, se animen a hacer cualquier deporte y no tengan ninguna etiqueta para poder disfrutar de lo que más les apetezca hacer en su vida y en sus tiempos libres. Se puede llegar a participar en campeonatos importantes aunque tengas un sueño de muy pequeñita. Por ello es súper importante. Se está haciendo un maravilloso trabajo en eso y se ve ahora en París. 

Antes has destacado que los otros Juegos Paralímpicos de Río y Tokio habían sido en la otra punta del mundo. ¿Ahora te vas a llevar a la familia y amigos a París para que te puedan ir a ver? 

Sí, en París vienen muchos. Por eso estoy súper emocionada justamente, porque van a poder venir casi 11 o 12 amigos míos, mis padres y mi hermano. Mi madre y mi hermano no habían podido venir a ninguna y mi padre sí que vino de Río, así que poderlos tener a todos juntitos ahí en las gradas para mí va a ser una pasada. Me va a dar un chute de energía enorme para estos juegos. 

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