No sé quién dijo que “la honradez, no solo hay que aparentarla, sino también practicarla”, cosa que no suele ocurrir en la política, por desgracia. Este martes, a la hasta ahora vicepresidenta del gobierno valenciano Mónica Oltra, no le ha quedado más remedio que presentar su dimisión antes de que la cesara el presidente Ximo Puig, tras el revuelo público-mediático que se ha formado después de ser imputada por el presunto encubrimiento de abusos sexuales de su exmarido a una menor.