La Generalitat sopesa abrir un expediente a los profesores del IES El Palau Sant Andreu

Las acciones y reacciones ante la denuncia de Fiscalía acusando a nueve profesores del IES El Palau de Sant Andreu de la Barca por haber "vejado" supuestamente a hijos de guardias civiles por su actuación durante el referéndum del 1-O se siguen sucediendo a diario.

Primero fue uno de los agentes de la Guardia Civil que apareció en los medios explicando las acusaciones que sufrió sus hijos, luego el alcalde de la localidad pidiendo poder finalizar el curso escolar con "normalidad" y ahora la indignación de la familia de los profesores y un posible expediente a los maestros por parte de la Generalitat.

Según ha informado El Confidencial Digital, desde el Ministerio de Educación, responsable del departamento de Ensenyament por la aplicación del 155, está estudiando abrir un expediente a los profesores del IES El Palau acusados por la Fiscalía ya que parece que siguen impartiendo clases y en ningún momento el centro escolar ha tomado medidas.

El problema es que los altos cargos del departamento de la Generalitat se muestran contrarios a tomar estas medidas ya que por el momento se trata sólo de una acusación presentada por la Fiscalía y que todavía no ha sido aceptada para llevar a juicio. Pero el testigo del Guardia Civil presenta muchos detalles.

PROFESORES Y FAMILIAS AFECTADAS

Por otro lado, familiares de los docentes encausados del Institut El Palau han dicho que los profesores están indefensos ante las acusaciones a raíz del 1-O y han negado que "señalasen a los alumnos hijos de guardias civiles, los humillasen o expresasen ningún sentimiento de animadversión hacia el cuerpo".

En una carta abierta que publica el diario digital Vilaweb, explican que al día siguiente del 1-O se dio la opción a los alumnos de hacer un pequeño acto --en el patio a los de ESO o ante la puerta a los de Bachillerato-- que consistía en unos minutos de silencio, pero "no es cierto que se les obligase".

Añaden que en las aulas se permitió hacer un debate donde los propios alumnos podían hablar sobre los hechos del referéndum, aunque "en ningún caso los profesores impusieron su opinión".

Lamentan que la reacción de algunos padres ante un acto de "libertad de expresión" fue culpabilizar y denunciar a los docentes por un presunto delito de incitación al odio, y recuerdan que se han personado como parte acusadora 18 familias del millar de alumnos del centro.

También recuerdan que los profesores fueron citados a declarar en enero, que contestaron todas las preguntas y negaron las acusaciones, pero que la Fiscalía "ha dado credibilidad al atestado de la Guardia Civil, desatendiendo las declaraciones de los acusados".

"Nosotros, los familiares, denunciamos ante la opinión pública su indefensión. Recordamos que la Conselleria de Enseñanza está intervenida por el 155 y ha silenciado toda manifestación pública que contrarreste el relato imperante", remarcan.

"CAMPAÑA MEDIÁTICA"

Critican la "campaña mediática que ha dado por buenos los argumentos de la Fiscalía sin esperar la acción de la Justicia", en la que confían, y que miembros del Gobierno central se han posicionado junto a la Fiscalía.

Remarcan además que estos profesores tienen una larga trayectoria y han sido siempre bien valorados por sus compañeros: "Resulta inverosímil acusarlos de hacer lo contrario de lo que han hecho siempre: educar en la convivencia y el respeto".