Tamara Carrasco sigue en libertad condicionada un año después de su detención

Este 10 de abril, hace un año que agentes de la Guardia Civil acudieron a Viladecans y a Esplugues de Llobregat para detener a los miembros de los CDR Tamara Carrasco y Adrià Carrasco por los presuntos delitos de terrorismo, rebelión, sedición y desórdenes.

Mientras que los policías no pudieron dar con el paradero de Adrià, que se fugó a Bruselas, la vecina de Viladecans fue detenida hasta que dos días después la Audiencia dictaminó medidas sus medidas cautelares: Tamara tenía la obligación de presentarse todos los lunes en el juzgado, prohibición de salida de Viladecans salvo para acudir al trabajo si éste estuviera fuera de su localidad, la necesidad de autorización judicial para salir del término municipal, prohibición de salida del territorio nacional y obligación de facilitar número de teléfono y una dirección para que pueda estar localizable. Y estas medidas siguen vigentes.

Pese a que finalmente la Audiencia Nacional rechazó juzgarla por los delitos de terrorismo y rebelión y mantener sólo el de desorden público, Tamara tiene que cumplir a raja tabla estas medidas y no ha podido salir ni siquiera a ver a su madre cuando ésta se encontraba enferma.

La Fiscalía, que seguía acusando a Tamara de rebelión y terrorismo, intentó varias veces que se reconsideraran sus acusaciones lo que provocó que hasta el 8 de noviembre la Audiencia Nacional no trasladara su caso a los juzgados decanos provinciales de Catalunya. Pero desde entonces se han sucedido los problemas.

Carrasco ha explicado que tras presentar varios recursos se le ha denegado el levantamiento de esta medida cautelar, que le impide salir de su municipio excepto para trabajar -aunque tampoco lo hace por estar de baja-, y debe personarse cada lunes en los juzgados de Gavà.

Pero es que además, la viladecanense ha detallado que su caso no ha sido asumido aun por ningún juzgado y la Audiencia Provincial de Barcelona debe designar uno después de haber recaído en el de Gavà, por ser su partida judicial, y que este rechazara la competencia.

Esto supone que mientras ningún juzgado se haga cargo del caso de Tamara, las medidas que adoptó el juez de la Audiencia Nacional Diego De Egea se mantienen en vigor hasta que algún juez de un juzgado catalán se haga cargo de la causa y revise si se deben seguir aplicando estas restricciones de movimiento que vive Carrasco.

Tamara ha denunciado en diversas ocasiones su situación, su caso es conocido en el municipio, y ha criticado varias veces las actuaciones judiciales que la retienen en Viladecans. Ahora, cuando se cumple un año de su detención ha declarado en TV3 que fue "irreal, inverosímil" y sin sentido. Y asegura que ella y Adrià Carrasco están "en indefensión jurídica".

"TEATRO ORQUESTADO"

Por su parte, el vecino de Esplugues, que no llegó a ser detenido ya que huyó y actualmente vive en Bruselas, ha definido su causa como "un teatro que se ha orquestado para atemorizar a la gente", y ha señalado que vive una situación jurídica similar a la de Tamara Carrasco, ya que ningún juzgado ha asumido su caso aun.

"El problema de fondo es que nadie tiene valor de coger este caso y archivarlo", ha opinado, y ha dicho que no se plantea volver a España, donde tiene una orden de búsqueda y detención, porque hay un 90% de posibilidades de que la medida cautelar que se le impusiera fuera la prisión preventiva, ha augurado.

Ha detallado que en Bruselas estudia, trabaja y tiene un círculo de amigos, y "el exilio de hoy en día no es el de antes" porque hay posibilidad de comunicación y está a dos horas en avión de su ciudad.

A la pregunta de si les han ofrecido concurrir en alguna lista electoral de cara a las próximas elecciones, Tamara Carrasco ha dicho que sí pero que ha rechazado la oferta, mientras que Adrià Carrasco lo ha negado.