Esparreguera abrirá la piscina municipal este verano como refugio climático

La piscina municipal de verano de Esparreguera abrirá esta temporada como refugio climático. Así lo ha anunciado el alcalde de Esparreguera, Eduard Rivas, después de que el nuevo decreto ley de medidas urgentes que la Generalitat aprobó el martes para hacer frente a la sequía posibilite la apertura de piscinas públicas y privadas, siempre que sean declaradas como a refugio climático. 

La delimitación de estos espacios está en manos de los ayuntamientos y esto permitirá el consistorio abrir la piscina municipal durante los meses de verano, ya que este equipamiento es uno de los tres refugios climáticos que existen actualmente en el municipio, los demás son la Biblioteca Municipal el Ateneo y el Centro Dual. 

En referencia a las piscinas de titularidad privada, el decreto indica que aquellas que los ayuntamientos y propietarios acuerden como refugio climático podrán llenarse siempre que se abran a la ciudadanía en las mismas condiciones que funcionen las piscinas públicas. 

Paralelamente, el decreto ley también modifica el régimen sancionador que se aplica a los municipios para superar las dotaciones de consumo establecidas en el contexto de sequía, de modo que el período analizado pasará a ser trimestral y se habilitará que las sanciones se puedan abonar de forma fraccionada.

El alcalde de Esparreguera, Eduard Rivas, ha asegurado, en declaraciones a la emisora municipal, que “abriremos la piscina municipal de verano, ya sea como refugio climático o bajo cualquier otra denominación que permita la normativa, porque debemos poder compatibilizar la situación de sequía con la salud de los vecinos y vecinas de la villa”. 

De hecho, el Ayuntamiento ya trabaja desde otoño con la hipótesis de abrir el equipamiento, ya que, según ha explicado el alcalde, “para poder tenerlo todo listo para la temporada de verano se necesita realizar todo un trabajo previo”, que incluye la planificación de las tareas de mantenimiento de la instalación y la licitación del contrato del servicio de monitorización y socorrismo, entre otros. 

La piscina municipal de verano es uno de los tres refugios climáticos que existen actualmente en el municipio, junto con la Biblioteca Municipal el Ateneo y el Centro Dual. Según el nuevo decreto del gobierno catalán la habilitación de estos refugios climáticos, es decir, espacios naturales o urbanos que ofrece unas condiciones ambientales benignas para protegerse de un contexto desfavorable, como demasiado calor o escasez de agua, deberá comunicarse a la Agencia Catalana del Agua.

El alcalde de Esparreguera, como presidente de la FMC, ha formado parte de las negociaciones con la Generalitat para abordar la modificación del plan especial de sequía. El decreto aprobado incorpora tres concreciones en el Plan especial de sequía: el establecimiento de un censo de refugios climáticos donde los municipios podrán incluir piscinas públicas y privadas abiertas a la ciudadanía; la fijación de umbrales de consumo por plaza para los establecimientos de alojamiento turístico equivalentes al consumo de los ciudadanos de Catalunya, y la introducción de un régimen especial para regular las aportaciones de recurso hídrico que hagan al sistema las desalinizadoras portátiles de titularidad privada. 

Además, el documento modifica el régimen sancionador que se aplica a los municipios para superar las dotaciones de consumo y hace que el período analizado pase a ser trimestral y habilita que las sanciones se puedan abonar de forma fraccionada.

En este sentido, el alcalde de Esparreguera, Eduard Rivas, ha apuntado que “los objetivos fijados por los municipios en la negociación con el gobierno catalán se han logrado, tanto la reducción de las sanciones a los ayuntamientos, que consideramos que son injustas, como la apertura de piscinas públicas a la ciudadanía como refugio climático, pero no estamos de acuerdo con que el control sobre la apertura de las piscinas privadas deba recaer en los Ayuntamientos”. 

Rivas ha apuntado que "no queremos que la Generalitat traslade toda la responsabilidad a los ayuntamientos, porque es una situación "ingestionable con los recursos municipales", que tiene "poca seguridad jurídica" y "que consideramos que es una decisión que le corresponde a la Generalitat" ”.

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