Morad sale de Brians 2 tras su ingreso voluntario por atentar contra la Policía
El rapero aceptó una pena de dos años de cárcel por los hechos ocurridos en 2021
El rapero Morad recibió el 23 de mayo el tercer grado por unanimidad de la junta de tratamiento del Centro Penitenciario Brians 2, ubicado en Sant Esteve de Sesrovires, después de ingresar "voluntariamente" el 8 de abril para cumplir una condena de seis meses por conducir sin carné.
Fuentes penitenciarias han explicado que el plazo máximo para clasificar a un interno preventivo es de dos meses, y en su caso se ha hecho en un mes y medio.
Por el momento, Morad sigue en Brians 2 a la espera de ser derivado a un centro abierto, y mientras espera "sólo" saldrá los fines de semana --este último fue el primero que salió del centro--. Una vez ingrese en el Centro Abierto de Barcelona se hará una propuesta de horario de entrada y salida en función de su situación laboral.
En febrero, Morad aceptó una pena de dos años de cárcel por atentar contra agentes de la Policía Local de L'Hospitalet de Llobregat cuando le instaron a dejar de grabar un videoclip en la calle por falta de permiso, y en esta causa el fiscal estuvo a favor de suspender su ingreso a prisión porque la pena no superaba los dos años.
UN VIDEOCLIP SIN AUTORIZACIÓN
El 14 agosto de 2021 Morad grababa un videoclip en L'Hospitalet, con unas 150 personas de público y figurantes, y acudieron agentes de la Urbana ante quejas de vecinos por el ruido que causaba y por usar un dron sin permiso administrativo. Al llegar los agentes, las personas que participan en el videoclip los increparon y les lanzaron huevos y piedras, y Morad les espetó 'La calle es nuestra' y 'No pintáis nada aquí'.
Los policías avisaron a Morad de que no tenía permiso para grabar el videoclip en la calle, por lo que le instaron a parar, y él les desoyó "mostrando una conducta hostil y obstruccionista", expone el escrito de acusación de la Fiscalía y que el rapero ha reconocido.
"ESTO ACABARÁ MAL"
"Si seguís apareciendo en la plaza, esto acabará mal", dijo Morad a los agentes según recoge el escrito del fiscal, que añade que actuó presuntamente como instigador para que todos los asistentes insultaran a los agentes y les lanzaran huevos y piedras.
La acusación pública calculó que los desperfectos en seis coches policiales costaron en total 2.041 euros, una cantidad que reclama a Morad y que el artista ya consignó antes del juicio.
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