Cuando a sus señorías se le suben la vanidad y el poder al bisoñé, pierden el sentido por el que han sido elegidos y se creen el centro del universo.
Todos esperaban con expectación el primer Consejo de Ministros/as del Gobierno Sánchez, con el debut en el mismo del partido morado. La curiosidad sana por ver las fotos de rigor de los viejos y nuevos ministros entrando en el edificio noble de Moncloa.
Con la espantada de estos políticos conocidos, la crisis de Podemos solo acaba de empezar.