El plan de soterramiento de las vías de Sant Feliu prevé evitar la detención el tráfico ferroviario

Sant Feliu de Llobregat ha presentado el proyecto de soterramiento de las vías que cruzan la ciudad, una reclamación histórica que parece esta empezando a solventarse.

La Ponencia Unitaria del Entierro, tal y como se le ha denominado al acto celebrado el 3 de mayo en la Sala Iberia, ha estado conformada por representantes de los grupos municipales en el consistorio, y ha servido para explicar el plan. El alcalde de la localidad, Jordi San José, fue el encargado de iniciar el acto bajo el lema 'Bye, bye via' y llegó a comparar el proyecto con los Juegos Olímpicos de Barcelona '92.

El plan presentado prevé el soterramiento completo de las vías del tren en todo el término municipal de Sant Feliu, desde el arroyo de Pahissa hasta la carretera de la Sànson. Una actuación que se desarrolla sobre una longitud total de 2.955 metros, de los cuales 1.545 son soterrados. El trazado comienza a tocar con la calle Agricultura, en la zona industrial de Sant Feliu, y finaliza a su paso por la autovía B-23, dentro del término municipal de Sant Joan Despí.

Según han explicado los responsables del proyecto, la obra se ejecutará mediante un túnel en mina y con el uso de pantallas para reducir las molestias a la ciudadanía y evitar la instalación de vías provisionales y se prevé que la ejecución de este soterramiento dure unos 4 años.

Uno de los puntos claves de este plan es no interrumpir el servicio ferroviario en la ciudad, algo que han asegurado los responsables de la iniciativa, que han anunciado que durante las obras se habilitará una estación provisional. 

Una vez finalizadas las obras la estación definitiva será enterrada y estará en un lugar muy cercano a la estación que existe actualmente.

Más allá de este soterramiento, el proyecto contempla que una vez finalizadas las obras de se recupere un área de 120.000 metros cuadrados de suelo en medio de la ciudad y disponer de un espacio urbano de unos 52.000 metros cuadrados que conformará una gran avenida que tendrá una anchura mínima de 40 metros.

Por el momento la fase informativa se ha dado por abierta y seguirá hasta julio para asegurarse de que la ciudadania sabe todas las condiciones y tras el verano, de septiembre a diciembre de 2018 iniciar la fase de participación ciudadana.