​El “infierno” de los Juzgados de Gavà

La ola de calor ha afectado a todo el territorio y está causando graves problemas en algunos edificios tan relevantes y concurridos como los juzgados de Gavà, donde el 25 de junio trabajadores y usuarios sufrieron unas temperaturas de 33 grados y que llegaron a 36 a finales de semana.

Las causas, por eso, no es solo la ola de calor que sufre el país, sino que se le añade el hecho de “los problemas del sistema de climatización” de los juzgados del edificio Bautista y Roca. Unos problemas que son conocidos desde el mes de mayo y que a 27 de junio aún no se han solucionado, lo que está convirtiendo en un verdadero infierno trabajar o tener que acudir a hacer un trámite en las instalaciones.

Los trabajadores han trasladado los problemas a los responsables pero la respuesta de la Gerencia de la Generalitat les ha comunicado que la avería del sistema de climatización “es bastante importante” por lo que la reparación puede tardar hasta tres semanas. Algo que hace que no lleguen a tiempo para los próximos días de altas temperaturas. La empresa encargada del mantenimiento del edificio “ha suministrado una partida de ventiladores” a distribuir por todas las plantas, pero no son suficientes.

Informada de todo, la decana hay asumido la responsabilidad que le otorga le ley tras la situación prácticamente insostenible que se vive en las instalaciones. Ahora es ella quien tendrá que valorar si en los próximos días y hasta que se arregle la avería se sigue trabajando en las dependencias del edificio Bautista y Roca.

Los trabajadores lo único que dicen es que ahora el asunto está en manos de la decana y es ella quien, por el momento, tendrá que valorar qué hacer si la temperatura en los Juzgados de Gavà vuelven a superar los 27ºC.

Los empleados de las dependencias judiciales de Gavà aseguran que es un problema que sufren ellos pero también los usuarios que deben acudir a las instalaciones y que estos días han estado esperando en el Registro, por ejemplo, a más de 30ºc a que se tramitara su gestión.

La intención no es tanto cerrar los juzgados ante el calor como que la decana decida si alguna de las dependencias que registren estas temperaturas se cierran y los trabajaos se trasladan a otra sala. Mientras esto sucede, los trabajadores esperan que la ola de calor pase, se resuelva el problema del sistema de climatización y no trabajar en un “infierno”.