Martorell exige una reunión con Torra ante los "despropósitos" del Centro de Automoción

"Un cúmulo de despropositos". Así ha calificado el alcalde de Martorell, Xavier Fonollosa, la gestión que está haciendo la Generalitat del Centre de Formació Professional d'Automoció que, tras cinco años desde su construcción, sigue sin tener quien lo gestione.

De hecho, y por mucho que sean del mismo partido, Fonollosa ha pedido una reunión con el president del Govern, Quim Torra, para buscar una solución a la puesta en funcionamiento de el tan polémico centro. 

Este requerimiento llega después de que el ayuntamiento, en abril de 2019, reclamara la devolución de los terrenos públicos donde se ubica el centro de automoción para que el ayuntamiento puede gestionar que hacer con ellos y de que la Generalitat abriera la licitación de la gestión del espacio el 31 de julio y que el concurso haya quedado desierto tras dos prórrogas. 

Para el alcalde de Martorell la situación es completamente imperdonable, y considera que es "un cúmulo de despropósitos" que continúa dificultando la puesta en marcha del centro. Fonollosa ha criticado que la Generalitat "no tenga en cuenta ni la voz del sector de la automoción ni del ayuntamiento de Martorell". 

Y es que han pasado 10 años desde que el consistorio cediera gratuitamente los terrenos para la construcción del centro y cinco desde su apertura. Desde entonces, por el equipamiento, con un coste de 17 millones de euros y una capacidad para 14.000 alumnos, tan sólo han pasado unos pocos centenares de personas por año, debido a que el Servei Català d'Ocupació (SOC) suele ofrecer algún curso en las instalaciones.

Ante las reclamaciones de los terrenos por parte del ayuntamiento, el concurso que ha quedado desierto y la petición de Fonollosa de reunirse con Torra, la Generalitat lo único que ha decidido es plantear una nueva reunión para evaluar la situación del centro. En este encuentro está previsto que se reúna Presidència, Vicepresidència i Economia, Educació i Empresa para contemplar que opciones tienen. Las posibilidades que hay sobre la mesa en estos momentos son dos: volver a licitar la gestión del centro o apostar por la gestión pública.