Así será el plan anti-sabotajes para los trenes de Renfe en el Baix Llobregat

El Ministro de Transportes, Óscar Puente, planea un plan integral para combatir los sabotajes en los trenes de Cercanías de Catalunya. Este plan surge como respuesta a los recientes incidentes que han afectado gravemente la red ferroviaria, incluido un incendio que dejó fuera de servicio toda la red durante la jornada electoral. Para evitar futuras interrupciones, Renfe y Adif están implementando medidas de seguridad significativas.

Adif, la entidad encargada de gestionar la infraestructura ferroviaria en España, ha dado inicio al diseño de un ambicioso plan destinado a prevenir sabotajes en los trenes de Cercanías en Catalunya. Esta iniciativa ha sido promovida directamente por el Ministerio de Transportes, con el objetivo de salvaguardar la seguridad y el funcionamiento óptimo de los servicios ferroviarios en la región.

Es importante destacar que este proyecto toma mayor relevancia ante el próximo traspaso de la gestión de Rodalies a la Generalitat, que según todas las señales, estará bajo el liderazgo del socialista Salvador Illa en los próximos meses.

Con esta iniciativa, se pretende garantizar la seguridad y la fiabilidad de los trenes de Cercanías en Catalunya, ofreciendo a los usuarios una experiencia de viaje segura y eficiente. Adif está comprometido con el desarrollo de este plan en colaboración con las autoridades pertinentes, con el firme propósito de mantener la integridad y el buen funcionamiento del sistema ferroviario en la región.

Una de las primeras acciones es la contratación de vigilantes privados para reforzar la seguridad en las estaciones y áreas críticas de la red ferroviaria. Estos vigilantes trabajarán en coordinación con las fuerzas de seguridad pública para garantizar la integridad de las instalaciones y prevenir actos vandálicos.

COBRE POR ALUMINIO 

Una de las medidas más significativas es el cambio del material utilizado en la infraestructura. Se planea reemplazar el cable de cobre por cable de aluminio en toda la red de Cercanías. El cable de aluminio es menos atractivo para los ladrones, lo que reduce el riesgo de robos y sabotajes. Además, es más resistente y duradero, lo que garantiza una mayor fiabilidad en la operación del sistema ferroviario.

Este cambio también responde a la creciente profesionalización de las mafias del robo de metales, que han demostrado ser una amenaza seria para la seguridad de la infraestructura ferroviaria. Las últimas operaciones de las fuerzas de seguridad confirman esta tendencia, con organizaciones criminales que planifican meticulosamente sus acciones para sustraer materiales y venderlos en el mercado negro.

Especialistas en infraestructuras eléctricas explican que, en comparación con el aluminio, el cobre ofrece una mayor conductividad eléctrica y garantiza puntos de conexión más seguros y estables.

No obstante, esta desventaja del aluminio se está superando mediante el uso de cables más gruesos fabricados con este material, lo que los hace más resistentes al paso de la corriente eléctrica. Antes de la introducción de estas nuevas aleaciones, la exposición a los elementos ambientales provocaba la oxidación del metal, lo que generaba problemas en los puntos de conexión y afectaba la eficiencia del sistema eléctrico.

DETECTORES ANTIINTRUSIÓN Y MÁS VIGILANTES

Además, se instalarán detectores antiintrusión en puntos estratégicos a lo largo de la red de Cercanías. Estos dispositivos permitirán una detección temprana de cualquier intento de intrusión en áreas restringidas, lo que ayudará a prevenir sabotajes y actos delictivos.

Estos dispositivos están diseñados para detectar cualquier intento de intrusión o acceso no autorizado en áreas restringidas de las instalaciones ferroviarias. Funcionan mediante la detección de movimientos o vibraciones inusuales en áreas sensibles, como vallas perimetrales, puertas de acceso y zonas críticas de las estaciones.

Los detectores antiintrusión están conectados a un sistema centralizado de monitoreo, que alerta automáticamente al personal de seguridad en caso de una posible intrusión. Esto permite una respuesta rápida y efectiva ante cualquier amenaza, minimizando el riesgo de sabotajes, robos o cualquier otro tipo de actividad delictiva.

Además de los detectores antiintrusión, el plan también contempla la instalación de circuitos cerrados de televisión (CCTV) en puntos estratégicos de la red ferroviaria. Estas cámaras de seguridad proporcionarán una vigilancia continua y una supervisión visual de las áreas críticas, lo que ayudará a disuadir el comportamiento delictivo y facilitará la identificación y el seguimiento de posibles intrusos o personas sospechosas.

Para complementar estas medidas tecnológicas, también se prevé un aumento en el número de patrullas de seguridad propias, que estarán encargadas de realizar rondas regulares por las instalaciones ferroviarias para garantizar la seguridad y el orden.

PREOCUPACIÓN Y DESONFIANZA DE MOSSOS

El Ministro Puente ha expresado su preocupación por la seguridad en la red de Cercanías y ha destacado la importancia de tomar medidas preventivas para protegerla de posibles ataques. Además, ha subrayado la necesidad de una mayor cooperación entre las autoridades locales, regionales y nacionales para garantizar la seguridad de los pasajeros y la integridad de la infraestructura ferroviaria.

El ministro de Transportes y Movilidad Urbana, Óscar Puente, ha asegurado este martes que la "competencia" de velar porque no se produzcan robos como el que provocó una avería generalizada en el servicio de Rodalies el pasado domingo corresponde a Mossos d'Esquadra, a la vez que ha señalado que Adif y Renfe "no tienen ninguna responsabilidad de los actos vandálicos que se producen con excesiva frecuencia en Catalunya". 

"La competencia en materia de seguridad ya la tiene transferida la Generalitat de Catalunya. Y es a los Mossos d'Esquadra a quien les corresponde velar porque no sucedan hechos como los que acontecieron en la madrugada del domingo. Cosa que lamentablemente no hicieron", ha dicho Puente al ser preguntado en el Senado por el portavoz de Junts, Josep Lluis Cleries.

En resumen, el plan anti-sabotajes en los trenes de Cercanías de Catalunya representa un esfuerzo conjunto para fortalecer la seguridad y prevenir futuros incidentes. Con medidas como la contratación de vigilantes privados, la instalación de detectores antiintrusión y el cambio del cableado por material más resistente, se espera garantizar la fiabilidad y la eficiencia del sistema ferroviario en la región.

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