Segunda madrugada de altercados en el barrio de Sant Cosme en El Prat
Los hechos ocurridos la pasada madrugada en el Prat no son un suceso aislado, dado que esta misma semana una setentena de personas lanzaron piedras y objetos contundentes desde el puente cerca de la fábrica Damm a la B-22, una de las arterias principales por donde transitan miles de vehículos y hubo dos heridos y ningún detenido.
Este sábado de madrugada el barrio de Sant Cosme, en El Prat, ha vuelto a ser el epicentro de una nueva reyerta entre presuntamente pratenses del barrio y los Mossos d'Esquadra. Se vivió otro episodio de tensión donde un buen grupo de personas volvieron a enfrentarse e increpar en las calles del barrio a los Cuerpos de Seguridad y los Bomberos. Volvieron a quemarse diversos vehículos y contenedores para preocupación de sus propietarios.
En un vídeo difundido por Tik Tok se observa que los Mossos habían preparado un despliegue de una decena de patrullas y furgones policiales en el barrio. Sin embargo, los altercados también sorprendieron a los Mossos, tal y como ha podido conocer VilaPress, puesto que ha tenido acceso a imágenes en las que se muestra a los agentes con el equipamiento antidisturbios pero de paisano. Algo que preocupa a muchos miembros del cuerpo policial dada que ya se produjo un asalto a esta comisaria hace dos años. En aquella ocasión también fué operación antidroga realizada por los Mossos y la Polícia Local acabó en graves disturbios, y a pedradas contra la comisaría en la misma población. Algo que se ha vuelto a repetir tras ser desmantelado un punto de cultivo de marihuana en el epicentro del barrio el pasado miércoles.
En un audio difundido también por las redes sociales y al que ha tenido acceso Vilapress pero que ha sido posteriormente retirado se puede escuchar a un supuesto Mosso de la zona hablar de la situación de inseguridad que se ha vivido durante los disturbios en El Prat. Según un compañero del mismo cuerpo "los mandos de dicho agente estarían intentando conocer la identidad del mismo" dado que en el mismo se vierten graves acusaciones hacía el cuerpo y se resaltan las supuestas razones por la que los "polícias no han tenido posibilidad de defensa".
ACUMULACIÓN DE DISTURBIOS
Los hechos ocurridos la pasada madrugada no son un suceso aislado. El pasado jueves, una setentena de personas lanzaron piedras y objetos contundentes desde el puente cerca de la fábrica Damm a la B-22, una de las arterias principales por donde transitan miles de vehículos. Por su parte, los Mossos d'Esquadra, confirmaron a Vilapress que un conductor de autobús resultó herido durante estos actos violentos al romperse el cristal del vehículo que conducía. Además, estos disturbios han dejado herida a una segunda persona, según los cuerpos de seguridad.
Vilapress se puso en contacto con el Ayuntamiento de El Prat, que explicó que, tal y como han explicado Mossos, "se trata de una reacción a la operación conjunta de la policía autonómica y la local que permitió desmantelar y clausurar 15 pisos con plantaciones de marihuana". Según explicó el Ayuntamiento, "en las próximas noches hay previstos operativos policiales para evitar posibles nuevos disturbios".
A pesar de dichos dispositivos conjuntos con los Bomberos los incidentes se han vuelto a repetir sin que se haya producido hasta el momento ninguna detención.
CLAN FAMILIAR DE NARCOTRÁFICO
Una de las hipotesis policiales que se manejan en la investigación que continúa abierta es que el detonante de todo estaría motivado a raíz de la detención de siete miembros de un clan familiar dedicado al cultivo y narcotráfico de marihuana de forma intensiva en muchos de los pisos del bloque ubicado en la calle del Riu Anoia del Prat de Llobregat.
Parece ser que este clan familiar controlaba todo el bloque y lo dedicaba a la producción de marihuana desde el mismo centro de este barrio. Tras las detenciones las reacciones en contra no se han hecho esperar de forma muy violenta y que ya suman hasta el mmomento múltiples destrozos de mobiliario urbano, un autobus, vehículos privados y dos heridos y cuya cuántia de coste está todavía por cuantificar.
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