Olesa denuncia que los actos incívicos cuestan al municipio 70.000 euros anuales

Cada año se hará reposición de jardineras y mobiliario urbano dañado, como papeleras, bancos, carteleras, elementos de parques y jardines o limpieza de grafitis. Los actos incívicos y de vandalismo representan un coste estimado de entre 60 y 70 mil euros al año. Esto es lo que calcula el Ayuntamiento de Olesa que cuesta de media reparar o arreglar acciones incívicas en la vía pública como reposición de contenedores quemados y otro mobiliario urbano dañado, limpieza de grafitos o no reciclar correctamente. 

"Sólo en renovación de contenedores se gastan más de 45.000 euros al año, contando una media de 30 contenedores al año y es que cada contenedor, con la retirada y limpieza del espacio son 1.600 euros" ha detallado el concejal de Espacio Público y Equipamientos, Iván Carreira.

Por esta razón, desde la Concejalía se quieren intensificar esfuerzos para intentar frenar en lo posible los actos vandálicos que mayoritariamente son la causa de estos incendios de contenedores. Desde el consistorio destacan que ese dinero, se podría destinar a servicios mucho más provechosos para la ciudadanía que la reposición de contenedores a causa de actos vandálicos.

En esta línea, el concejal avanza que se está estudiando la posibilidad de instalar cámaras de videovigilancia en las zonas de contenedores para evitar su quema y también las posibles afectaciones en torno a vehículos estacionados o edificios anexos.

Desde el área de Espacio Público y Equipamientos también se incide en el coste que representa la reposición de mobiliario urbano dañado como bancos, papeleras, paneles informativos, fuentes o mesas en zonas de recreo. “Para evitarlo las mesas de picnic se han tenido que buscar de hormigón y con protecciones antivandálicas para evitar que se arranquen, como ha ocurrido con las mesas instaladas en la nueva zona de Cal Candi, detrás del hogar de niños La Baldufa, o en la zona de picnic del Areny del Molí”, ha apuntado Carreira.

Otro de los temas que preocupan son los vertidos ilegales en el medio natural o no reciclar correctamente. “No poner los residuos en los que toca penaliza económicamente. Cada fracción de los contenedores se envía a un centro de tratamiento y pagamos por la cantidad de toneladas que vertemos pero también por la calidad de las toneladas. Es muy importante que la separación de materiales sea correcta, puesto que la presencia de impropios, de residuos que no correspondiente a la fracción en cuestión, dificulta el proceso del reciclaje” ha destacado el concejal.

Para concienciar a las personas incívicas que entiendan que lo público es de todos y que debe cuidarse, desde el Ayuntamiento se llevan a cabo campañas de concienciación y civismo. El año pasado se hizo la campaña "Compartimos Olesa. ¡Hagámoslo Bien!". Entre otras actuaciones, se mostraban paneles con fotografías de actos incívicos como contenedores desbordados de desechos y escombros, contenedores quemados o paneles rotos, con la información del coste que representa arreglar todas estas acciones incívicas.