Así será la nueva Biblioteca de Olesa: el doble de superficie y una zona verde

Los trabajos de ampliación de la biblioteca Santa Oliva empezarán el próximo mes de enero (pasado las fiestas de Navidad). El equipamiento se concibe con una construcción sostenible con el mínimo gasto energético. Estas obras tienen una duración prevista de 16 meses y estarán dirigidas por los arquitectos técnicos que redactaron el proyecto, el estudio Coll-Leclerc Arquitectos. Este estudio de arquitectura fue el ganador del concurso público que organizó la Diputació de Barcelona para el proyecto de ampliación de la biblioteca Santa Oliva de Olesa.

La ampliación de la biblioteca es un proyecto muy complejo que duplicará la superficie útil de la actual biblioteca con la construcción de una planta baja que ocupará todo el patio de la Casa de Cultura y al mismo tiempo también generará una nueva zona verde en el centro del municipio, con la construcción de una gran cubierta vegetal.

Judith Lecrec, una de las arquitectas responsables del proyecto, explica cómo surgió la idea. “Para nosotros era muy importante crear un espacio abierto y conectado con la naturaleza. Nos llamó mucho la atención el proyecto del Bibliolilà, el espacio de lectura en la zona verde de detrás de la biblioteca, y de ahí nos vino la idea de hacer un edificio con una gran cubierta exterior verde. También en el edificio actual de la biblioteca le queremos dar la sensación de estar en el exterior”.

La ampliación de la biblioteca aprovecha el solar del patio de la Casa de Cultura recuperando el espacio verde que tenía el antiguo Hotel Gori en su cubierta. “Tuvimos en cuenta la historia de este espacio a la hora de planificar la ampliación ya que aquí había sido el jardín del antiguo Hotel Gori y queríamos recuperar esta idea de zona verde en la ampliación del equipamiento y esto se hará con la cubierta verde”.

El proyecto no sólo amplía el equipamiento con un nuevo edificio en este patio, sino que también mejora el edificio existente. "Habrá una única entrada por la biblioteca y el resto de servicios de la Casa de Cultura, pero cuando la biblioteca esté cerrada se podrá acceder igualmente a la cubierta exterior, que será de acceso público para acoger actos".

La construcción también destaca a nivel medioambiental por el ahorro que va a representar: el ahorro pasivo del poco consumo que necesita el edificio, y también activo, porque tendrá una placa fotovoltaica que generará luz en los equipamientos municipales.

El objetivo es que este edificio tenga el mínimo gasto energético. Tendrá un techo de suelo vegetal que aísla del sol y permite reducir el gasto energético del aire acondicionado, al tiempo que deja que entre luz natural. Para la energía necesaria para poner en marcha las máquinas que renuevan el aire o por la poca luz artificial que va a necesitar, habrá placas solares fotovoltaicas en la cubierta de la Casa de Cultura.

Esta cubierta verde se podrá regar con el agua acumulada en las cubiertas que hay en la Casa de la Cultura. Lo interesante de ésta la cubierta verde es que no sólo es un espacio decorativo y para el ocio, sino que también garantizará el aislamiento térmico del edificio y lo hará más eficiente.

“En los proyectos actuales los arquitectos ya pensamos en la sostenibilidad desde el minuto cero, en aprovechar todos los recursos como placas solares, recoger el agua, utilizar materiales sostenibles para su construcción y minimizar costes. Nosotros aquí podríamos haber hecho un edificio independiente, no conectado con el actual, pero hemos decidido que si ya había lavabos, una sala, un auditorio, no debería hacerse más para no duplicar instalaciones y así no encarecer el gasto energética” ha explicado la arquitecta responsable.

Con las placas fotovoltaicas que se instalarán en la cubierta de la Casa de Cultura se creará una comunidad energética para el autoconsumo de la biblioteca, en la Casa de Cultura y también del edificio del Ayuntamiento. El nuevo edificio es eficiente energéticamente y sólo consumirá un 3%; la parte más antigua de la biblioteca, un 25%; y el edificio del Ayuntamiento representa un 50% de la producción de estas placas.