Viladecans, pionera en la protección de abejas: ha trasladado a 45.000 de ellas a otro municipio
Se trata de un proyecto que lucha por mejorar la polinización en las zonas rurales y evitar problemas en los entornos urbanos
Viladecans es el epicentro de una iniciativa pionera para la protección de las abejas, que se ha convertido en un modelo de colaboración entre el entorno urbano y rural. En el marco del programa Redicat, un total de 45.000 abejas fueron trasladadas desde esta ciudad del Baix Llobregat hasta Riner, en un esfuerzo por mejorar la polinización en las zonas rurales y evitar problemas en los entornos urbanos.
El traslado se realizó con el uso de cajas-nido, que sirven de cebo para las abejas, y es el segundo que se lleva a cabo desde Viladecans, tras el éxito de la primera operación en Baix Llobregat. Este proyecto, que forma parte de una serie de acciones para proteger a estos insectos fundamentales para el ecosistema, busca promover la biodiversidad y apoyar la producción agrícola en las áreas receptoras, como Riner, Alcover, y próximamente Maials.
Uno de los aspectos más destacados del proyecto fue la participación de los escolares. Unos 50 niños de Viladecans y 14 de Freixenet, vestidos con trajes de apicultor, participaron activamente en el traslado, aprendiendo sobre la importancia de las abejas y su rol en la naturaleza. Además, visitaron el espacio Apiària, el Alberg de les Abelles de Catalunya, y participaron en talleres de fabricación de velas, montaje de hoteles para insectos y catas de miel.
Viladecans, que ya se considera pionera en la defensa de las abejas, ha integrado este tipo de iniciativas en su modelo de ciudad. Proyectos como Bee Happy son una muestra del compromiso local con la sostenibilidad y la protección del medio ambiente. Este tipo de acciones son clave para sensibilizar a la población sobre el daño que los insecticidas y otras prácticas nocivas pueden causar a las abejas, que son vitales para la polinización y, por ende, para la agricultura y la biodiversidad.
El proyecto Redicat no solo se limita al traslado de abejas, sino que también ha fomentado la investigación, la educación y el turismo en torno a la apicultura. En la finca de la Devesa de Maials, por ejemplo, se están llevando a cabo estudios para mejorar la polinización y promover la producción de miel, ampliando así el impacto de la iniciativa.
Joan Maria Llorens, presidente de la Associació d’Amics de les Abelles, Encarni Garcia, teniente de alcalde de Viladecans, y Joan Solà, alcalde de Riner, han sido algunas de las voces clave en la materialización de este proyecto, que ha unido ciudades y pueblos para proteger a las abejas y mejorar la biodiversidad.
La cooperación entre localidades y el éxito de la primera edición del programa demuestran que, con esfuerzos conjuntos, es posible crear un entorno más saludable para las abejas y, por ende, para el planeta.
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