Según ha informado Trànsit en un comunicado, esta primera fase ha sido "en general, tranquila".
Esta campaña electoral, en Viladecans, está salpicada de "pequeñas trampas".
El cartel de la Encarni erigiéndose como representante de las mujeres trabajadoras y unos papeles tirados por el suelo criticando a ERC amenizan el camino hacia las elecciones municipales.
Los iniciativos han presentado su balance de gestión durante estos cuatro años de gobierno compartido con los socialistas sin una pizca de autocrítica.
Aquí el resumen de los artículos de opinión/tribuna que ofrece el boletín municipal en este último número de fin de mandato de una legislatura que no ha sido fácil.
Como era de esperar, pocos puntos a debatir en el orden del día. Dos mociones, despedidas y suspiros de buen parte del público asistente.
Las elecciones generales han llegado a su fin, con unos resultados, en algunos casos, sorprendentes en el Baix Llobregat: la irrupción de Vox a costa de quitarle votos al PP y la subida en la comarcal de ERC, con la sorpresa de que los republicanos no han ganado en el pueblo de Oriol Junqueras.
La verdad es que las elecciones atraen como el panal de rica miel, a los que quieren colgarse medallas, anunciando temas que solo son enunciados.
Cuando hay convocatoria electoral, uno de los puntos donde acuden los representantes de los partidos políticos son los mercadillos.
A la manifestación de apoyo a Tamara faltaron ciudadanos de toda la vida. No fueron por el desacuerdo total con las pintadas que consideran lamentables.
El súper ha realizado trabajos de pintura afectando tanto a clientes como a paradistas en el día de mayor venta sin consultar con los paradistas.
El ordeno y mando de Lligadas, su prepotencia y su política dedocrática de nombramientos que lleva a la asamblea para que las bendigan, ha hecho que 12 personas se hayan dado de baja del partido.