Desmantelado un punto de venta de droga en Cornellà de Llobregat

Agentes de los Mossos d’Esquadra han detenido a cuatro hombres, el pasado 1 de abril, como presuntos autores de un delito contra la salud pública, después de desmantelar un activo punto de venta de drogas en un edificio del barrio de Sant Ildefons.

La investigación comenzó en el mes de enero, tras recibir diversas quejas vecinales que alertaban de un trasiego inusual de personas en un inmueble de la zona. Los vecinos sospechaban que en uno de los pisos se estaban realizando actividades relacionadas con el tráfico de estupefacientes.

Los agentes iniciaron dispositivos de vigilancia discreta y, tras semanas de observación, confirmaron que en el domicilio señalado se vendían dosis de cocaína adulterada —conocida como “basuco”— y marihuana. Se detectó también que los compradores accedían con frecuencia al edificio, algunos de ellos portando herramientas y maletas de trabajo que, según la investigación, eran aceptadas como forma de pago por la droga.

Estas herramientas, de procedencia ilícita, se sospecha que proceden de robos cometidos en el interior de vehículos, especialmente furgonetas de empresas. El domicilio se había convertido en un punto de referencia para consumidores de la zona, incluidos usuarios con problemas de drogodependencia, algunos de los cuales eran acompañados personalmente hasta la vivienda por los propios implicados.

El operativo culminó el 1 de abril, cuando los Mossos realizaron una entrada y registro en el domicilio, bajo la autorización del Juzgado de Guardia de Cornellà de Llobregat. Durante el registro se incautaron dosis preparadas de cocaína adulterada, marihuana, básculas de precisión y diversos utensilios utilizados para la manipulación y distribución de droga. También se localizaron numerosas herramientas y maletas de trabajo, cuya procedencia aún se está investigando con el objetivo de devolverlas a sus legítimos propietarios.

Los cuatro detenidos fueron puestos a disposición judicial tras su arresto, mientras la investigación sigue abierta para determinar la magnitud del tráfico y posibles conexiones con otros delitos patrimoniales.