La rápida propagación de casos en marzo de coronavirus ha llevado al Gobierno a declarar el estado de alarma por segunda vez en democracia.
Mientras los primeros pacientes con coronavirus ya están llegando a las instalaciones provisionales habilitadas en Ifema, en Madrid, tras cumplirse la primera semana del estado de alarma en nuestro país el gobierno anuncia que tendremos que sumarle 15 días más al confinamiento inicial previsto.
Hay 1.141 personas ingresadas en las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI).
Se permite salir a la calle para asistir a centros sanitarios, para desplazarse al lugar de trabajo para efectuar su prestación laboral, profesional o empresarial, o para volver al lugar de residencia habitual.
La comunidad de Madrid sigue siendo la más afectada por los contagios. Le siguen Catalunya, La Rioja, Andalucía y Castilla-La Mancha por orden de afectación.
A Marruecos le interesa el monte Tropic porque alberga las mayores reservas conocidas de telurio y cobalto. Con el yacimiento de cobalto se podrían construir, según los entendidos, más de 270 millones de coches eléctricos.
Frank Hernández, Yan Carlos Cepero y Francisco Sánchez son los tres seleccionados del Viladecans por José Luis Riera.
Godoy abandonó España con 40 años de edad, y se pasó más de media vida en el destierro, sus bienes fueron confiscados y murió en la miseria.
De momento, la única verdad es que los ciudadanos no se comprometen ya con nadie, y que la mayoría absoluta ha pasado a mejor vida.
La corrupción generalizada de los gobiernos nacionalistas, unida al desclasamiento de una parte del pequeño empresariado catalán tras la crisis de 2008, explica la elección del año 2012 para poner en marcha dicho proceso de ruptura.
Hay que superar los enfoques cortoplacistas que solo persiguen soluciones temporales para salir del paso.
Desde luego, este miércoles, 6 de septiembre, será uno de los días más tristes de nuestra convivencia en común en la democracia que con tanto alborozo celebramos cuando fuimos todos capaces de conseguirla tras la muerte del general Franco.
Los catalanes estamos en el punto cero de nuestras discrepancias, ese lugar en el que nos hemos de mirar de frente y preguntarnos por qué hemos llegado a esta situación y, sobre todo, quiénes son los que nos han traído a este callejón sin aparente salida.
Si todo transcurre según lo previsto, los Grandes Tribunales tendrán trabajo a destajo, pero también los pobres funcionarios y sobre todo... los Mossos, quienes, de repente, se han convertido en la fuerza de choque del Estado.
España debe reducir antes de 2030 el volumen de personas en riesgo de pobreza y exclusión social en al menos un 62%, para limitar a menos de cinco millones los ciudadanos en esta situación y dar así cumplimiento con la Agenda de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas.