Es evidente que estamos en una guerra cuyo enemigo único es el coronavirus. Contra este es sobre quien deben dirigirse todos los esfuerzos para terminar con el antes que siga acabando con las vidas de miles de personas, como está sucediendo ahora.
Las fiestas de este año también tendrán un mensaje integrador en defensa de las políticas de igualdad de género y enfocado a reivindicar el feminismo.