El servicio de teleasistencia de la Diputació crece cerca de un 11%

La Diputació prevé que el servicio de Teleasistencia cuente en 2020 con más de 100.000 personas.

El Servicio Local de Teleasistencia de la Diputació de Barcelona registró durante 2017 su mayor crecimiento de los últimos diez años, con un 10,9%, incorporando a cerca de 8.000 usuarios y alcanzando los 82.282, ha informado la corporación provincial este lunes en un comunicado.

La Diputació prevé que el servicio cuente en 2020 con más de 100.000 personas, siguiendo el nuevo modelo ya aplicado, centrado en la persona, la eficiencia y la apuesta tecnológica, que ha comportado la instalación de más de 9.000 detectores y dispositivos de seguridad, que han aumentado un 63% respecto a 2016.

Este modelo de atención centrado en la persona se lleva a cabo mediante el sistema Respuesta Eficiente en Teleasistencia (Ret), basado en dar una respuesta adaptada a las necesidades de cada usuario, con una mayor eficiencia y valor tecnológico, prestando el servicio en función del perfil, riesgos y hábitos de vida de cada persona.

Así, los usuarios se distribuyen en varios niveles para recibir el servicio adecuado según su situación, en función de su estado de salud y de sus relaciones sociales con familia y entorno, en tres niveles: el básico, con el 56,5%; el medio, con el 37,6%; el alto, con el 5,2%, y el de muy alto riesgo, con el 0,7%.

El servicio se intensifica para las personas con más riesgo, con más llamadas de seguimiento y más visitas domiciliarias, entre otras acciones, y se evita la excesiva protección de las personas más autónomas a través de actuaciones preventivas.

Además, se han ampliado las unidades móviles para atender emergencias y realizar seguimientos, pasando de 11 unidades entre 2013 y 2016 a 29, de las cuales 16 serán de primera respuesta para atender emergencias, y 13 se dedicarán a realizar la actividad programada y eventualmente a atender contingencias.

También se han consolidado proyectos como el protocolo de sensibilización, prevención y sospecha de maltratos en el marco del servicio --mediante el que en 2017 se detectaron 300 casos con indicadores suficientes o elevados de sospecha--, y la prestación del servicio de apoyo fuera del hogar para quienes viven en núcleos rurales aislados y escasas relaciones sociales.