Abrera y Olesa critican las dudas del Gobierno sobre el fin de las obras de la B-40
Los alcades de ambos municipios, junto con los de Viladecavalls y Terrassa y agentes económicos, han articulado un frente común para conseguir un "un compromiso sólido" de finalización de estos trabajos.
Los alcaldes de municipios situados en torno a la autovía B-40 han lamentado que el director general de Carreteras del Ministerio de Fomento, Jorge Urrecho, ha manifestado sus dudas de que las obras del conocido como Cuarto Cinturón estén acabadas en octubre de 2019, tal como aseguró el ministro Iñigo de la Serna en junio del 2017.
Urrecho se ha reunido en Madrid con los alcaldes de los ayuntamientos de Terrassa, Viladecavalls, Olesa de Montserrat y Abrera para informarles sobre el estado de ejecución de la autovía B-40 de Barcelona en su tramo entre Olesa de Montserrat y Viladecavalls, y ha asegurado que los trabajos siguen avanzando.
Urrecho ha trasladado a los alcaldes la "importante inversión" que se está realizando en esta actuación después de los recortes presupuestarios producidos en mayo de 2010 y que afectaron de forma importante a esta obra, aclarando que desde entonces se han invertido más de 72 millones de euros.
Actualmente se está trabajando en el túnel y en el enlace con la autopista C-16: en el túnel se ha concluido el sostenimiento y próximamente finalizará la contrabóveda, mientras que en el enlace con la C-16 se están ejecutando movimientos de tierras en las colectoras y en el desvío de tráfico necesario para ejecutar los dos viaductos centrales de la estructura de cruce entre ambas carreteras.
Pero las dudas sobre la finalización de estas obras para el 2019 tal y como se había prometido ha molestado a los alcaldes y alcaldesas de Viladecavalls, Olesa de Montserrat, Abrera, Terrassa y agentes socioeconómicos.
Tanto las administraciones como las entidades socieconómicas han articulado un frente común para conseguir un "un compromiso sólido" de finalización de esta obra, que han calificado de capital para el territorio, tanto para la mejora de la movilidad como para la competitividad económica y empresarial de la zona.
Los responsables del proyecto, tal como ha detallado el ayuntamiento de Terrassa, han "evidenciado que todavía quedan muchos temas por emprender" y que esto les impide fijar una fecha de finalización, por esta razón los representantes de las localidades catalanas han reclamado "máxima celeridad y compromiso".
Ambas partes han acordado una visita a los trabajos en curso para el próximo mes de septiembre y así "conocer de primera mano" los detalles de su evolución.
La B-40, conocida popularmente como el Cuarto Cinturón o la Ronda del Vallès, es una antigua reivindicación de Catalunya, ya que aparece en todos los planes de carreteras desde 1968 y el Ministerio de Fomento se comprometió a tenerla operativa en 1996.
El objetivo de esta infraestructura es unir Abrera (Baix Llobregat) y Granollers (Vallès Oriental) pasando por Terrassa y Sabadell (Vallès Occidental), uniendo dos comarcas que representan 2,1 millones de personas, el 25% de la población ocupada, el 27% del PIB de Catalunya y el 40% del VAB industrial.
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