La lucha contra la precariedad de las trabajadoras de servicios de atención domiciliaria
Las empleadas de Sant Feliu han salido a la calle para protestar por los recortes que aplica la empresa Accent Social que se encarga del servicio en otros cinco municipios del Baix Llobregat.
Las trabajadoras de los servicios de atención domiciliaria (SAD) de muchos municipios se encuentran con problemas ajenos a las tareas que han de llevar a cabo y a las personas que han de atender, más bien, sus principales problemas son los recursos con los que cuentan. Si no que se lo digan a las trabajadoras del SAD de Sant Feliu de Llobregat que se encuentran sin el material adecuado para trabajar en condiciones.
Ellas y ellos, se encargan de prestar atención a personas mayores, niños y discapacitados. Los más vulnerables de la sociedad. En Sant Feliu, la empresa que se encarga de dar este servicio es Accent Social, que también ofrece la misma prestación en Esplugues de Llobregat, Castelldefels, El Prat de Llobregat, Viladecans y Sant Joan Despí. Ha ganado el concurso público en todas estas localidades del Baix Llobregay y otras más en Catalunya pero parece que no tiene el material suficiente que necesitan sus trabajadores.
Guantes, batas, mascarillas, son productos básicos para ofrecer una buena atención y evitar ciertos contagios a los beneficiarios del servicio y a los empleados que llevan a cabo ciertas tareas y que en ocasiones trabajan con productos químicos.
Sant Feliu ha sido el primer lugar donde han aparecido estas quejas. Allí las trabajadoras del SAD lamentan que incluso se les han recortado las horas lo que hace que tengan que realizar todo su trabajo deprisa y corriendo y baje la calidad del servicio para unas personas que requieren la máxima atención.
A esto le suman la falta de formación que les ofrece la empresa que emplea a 500 personas sólo en el Baix Llobregat.
Los trabajadores aseguran que los vecinos de Sant Feliu a los que prestan su servicio están empezando a notar esta situación y temen que el servicio siga empeorando, que se apliquen más recortes o que incluso se queden sin este servicio municipal.
Este malestar ha llegado al ayuntamiento de Sant Feliu y es que las trabajadoras han salido a la calle y han conseguido que en el pleno municipal de septiembre los partidos se comprometieran a estudiar la situación del servicio de atención domiciliaria que ofrece la empresa concesionaria Accent Social y ver como pueden mejorar la situación de las empleadas. Una opción es la remunicipalización del servicio, pero el consistorio, liderado por Lidia Muñoz (Sant Feliu En Comú) junto con ERC, dice que lo tiene que estudiar.
Por su parte la empresa, dice ser consciente de que en Sant Feliu, por ejemplo, el servicio solo se ofrece por las mañanas y no atención completa y hace hincapié en que las administraciones deberían solucionarlo. Exculpándose así de uno de los problemas.
Sobre el recorte de horas y la remuneración, Accent Social alega que cumple lo que estipula el convenio colectivo que es una bolsa de horas que se pueden hacer de más por imprevistos pero que luego deben irse recuperando.
Las trabajadoras de Santr Feliu, mientras, advierten de que no se van a cansar de luchar por sus derechos y han iniciado movilizaciones y recogidas de firmas para conseguir que las empleadas tengan todo lo necesario y puedan ofrecer un servicio de calidad a los ciudadanos.
Escribe tu comentario