Este jueves, en rueda de prensa solemne, Armand Calderón, secretario de medidas penales y alternativas anunciaba que las juntas de tratamiento de las tres prisiones catalanas, donde se encuentran los políticos presos habían decidido por “unanimidad” proponer el tercer grado para los políticos del procés. Que la medida responde a una decisión de carácter técnico y que la Generalitat tiene que ratificar en un periodo de dos meses.
Calderón en toda su intervención ha intentando mantener la postura del tema técnico en la decisión. Que se cumple el reglamento de los presos como en cualquier otro caso. A nadie se le escapa la celeridad que se ha dado en todo el proceso una vez la sentencia ha sido firme.
A las almas caritativas que adoctrinaron en su día con el lema “la sentencia de 100 años de prisión” habría que preguntarles que tienen que decir ahora después del revuelo que levantaron y los efectos que tuvieron que aguantar el resto de la ciudadanía, la mayoría. Como se puede comprobar - a espera de lo que digan la fiscalía- los hechos están siendo bien distintos.
Cuando aún no se han cumplido los tres años de prisión, entre la prisión preventiva y el cumplimiento de la condena en firme, en menos de dos meses los políticos van a tener el tercer grado o lo que es lo mismo la semilibertad: podrán salir de lunes a viernes a la calle y solo volverán a dormir a la prisión y el fin de semana se quedan en casa. La aplicación del tercer grado es para todos ellos, independientemente de los años de la condena.
¿A cuántos años han sido condenados los políticos?: Junqueras a 13 años. Romeva, Turull y Bassas a 12 años. Forcadell a 11 años. Y Sánchez y Cuixart a 9 años de prisión. Ya en su día se hablaba de que los primeros en beneficiarse serían los Jordis. El último, Junqueras que podría obtener el tercer grado grado dentro de 14 meses.
Así podría ir enumerando como se contemplaba hace menos de un año lo que podía ocurrir para obtener la libertad condicional que a Junqueras le sería otorgada en el 2026 y a los Jordi, que serían los primeros en el 2023.
También podríamos pontificar sobre las personas que conforman la junta tan “unánime”, cuyas competencias tiene la Generalitat en este tema. En el lado opuesto, la Fiscalía de Catalunya y el Tribunal que componen el circuito “legal” o eso dicen.
El Kit de la cuestión es que nada es lo que parece y como dice un refrán popular “a quien buen árbol se arrima, buena sombra le cobija” y la justicia política y la otra justicia depende para quién no es tan justa, se diga lo que se diga. Me pregunto en voz alta lo que pensarán miles de familias sobre esta decisión, de privilegios "legales" y de circuitos unánimes cuando los cien años de prisión no han llegado a tres .
No es que estemos en contra de que salgan a la calle los políticos del procés, lo que queremos es que se aplique la misma medicina “legal” al resto de presos, ¿o es que quizás hay presos con pedigrí y presos de segunda?. La ley, las normas, y los derechos se deben aplicar a todos por igual. No hacerlo, ni es ético, ni igualitario, ni mucho menos justo.
Está claro que la política ha jugado y seguirá jugando un papel fundamente en este proceso. Quizás las elecciones que están a la vuelta de la esquina de Puigdemont hayan precipitado la decisión, para que algunos no enarbolen -que lo harán- la bandera del victimismo y encima salgan beneficiados en las urnas.
Casualmente, Puigdemont ha anunciado el mismo día que se conocía la noticia del tercer grado para los políticos presos que el próximo día 25 iba a presentar su nuevo partido que se presentará a las elecciones -que encabezará la lista el mismo - para salvar a Catalunya y llevarla a la independencia. Un gesto más de los salvadores de la patria, tan arraigado también en Catalunya.
El independentismo está dividido y ahora de lo que se trata es de tirarse los tratos a la cabeza entre los propios partidos nacidos de la CDC que tan buen provechó saco en sus mejores tiempos y de paso, como el que no quiere la cosa, abalanzarse sobre ERC para que no se haga con la presidencia de la Generalitat de Catalunya. Menudo lio se ha montado, como sino hubiera temas que requieran ser priorizados.
Escribe tu comentario