Primavera de multas selectivas

La Guardia Urbana de Viladecans, ha mantenido un pulso con el gobierno municipal y eso se traducido en que los ciudadanos no se han visto tan presionados por las multas. Ahora, con la firma del nuevo convenio, han sellado la paz  y los agentes del “orden” han vuelto a cumplir con los objetivos que le marcan "desde arribar": poner multas, sin atender las quejas de los ciudadanos.

Este domingo, sobre las 11:40  un coche de la policía municipal, en la Avda. Torrente Ballester se ha puesto las botas con el ristro de multas puestas , eso sí, sin bajarse del coche - debe ser que tienen problemas de movilidad. Los coches que estaban aparcados en las esquinas, sin molestar a nadie, como siempre han estado, por ir a buscar los periódicos, o situaciones breves, los agentes muy diligentes ellos, se han hartado a poner multas, sin escuchar las quejas de sus propietarios.
 

Pero no a todo el mundo lo tratan igual.  Como demuestra la fotografía, un coche de la empresa Sorigé, que trabaja mucho por Viladecans, ha dejado mal aparcado el vehículo, porque su conductor se ha ido al bar a desayunar, y la patrulla, no le ha puesto ninguna sanción por ocupar toda la zona de carga y descarga. Lo mismo ocurre con los coches de la brigada que dejan los vehículos en las esquinas  para ir a desayunar, tampoco son objeto de ninguna sanción. Está visto que, las leyes no se aplican igual para todos.

Así que están advertidos los ciudadanos, cuidado que los policías municipales, ya no están en huelga de multas y han vuelto con más fuerza que nunca.