Olesa pide priorizar la conexión entre Barcelona y Montserrat

La semana pasada, el Ayuntamiento de Olesa de Montserrat se reunió con la Generalitat de Catalunya y la Diputación de Barcelona para conocer el estado del proyecto de las Vías Azul, una infraestructura de caminos peatonales y ciclistas que transcurre paralelamente. lela en los cauces de los ríos Llobregat, Anoia y Cardener. 

Actualmente, este recorrido, que comienza en El Prat de Llobregat, llega hasta Martorell, desde donde debería conectar con el Camino del río de Olesa. El diseño de las Vías Azul se lleva a cabo mediante el Plan director urbanístico (PDU) y una comisión de seguimiento con representantes de la Generalitat, de la Diputación y del equipo redactor coordina los trabajos.

El concejal de Planeamiento urbanístico del Ayuntamiento, Marc Serradó, ha lamentado que durante el encuentro con la Diputación de Barcelona se les informó de que se priorizará la ejecución de los caminos que transcurren por los afluentes del Anoia y el Cardaner, que se harán este mandato, relegando el inicio de los trabajos del Llobregat hasta el 2027. El concejal de Urbanismo manifiesta su enfado ante "la falta de lógica a la hora de priorizar la conexión entre dos polos turísticos catalanes como son Barcelona y la montaña de Montserrat".

Las Vías Azul, entre las urbanizaciones del Mas de les Aigües y Casa Blanca, no pasarán junto al cauce del río Llobregat y se hará un tramo paralelo a la C-55 en un voladizo. Por este motivo, este tramo lo proyectan conjuntamente la Generalitat y la Diputació de Barcelona. 

El concejal de Planeamiento Urbanístico, Marc Serradó, se reunió con responsables de la Generalitat que aseguraron que la Generalitat aprovechará las obras de renovación y mejora del tramo de esta carretera entre Olesa y Collbató, previstas para 2025, para construir la infraestructura. Esta pasarela contará con una pantalla acústica para garantizar la intimidad y proteger de la contaminación acústica en las casas adyacentes. 

La Generalitat se comprometió a realizar un estudio acústico durante el mes de febrero de 2024 que permitirá determinar las características de esta medida de protección. Marc Serradó ha destacado "la importancia que el proyecto de las Vías Azul tiene por Olesa en cuanto a territorio, paisaje y turismo" pero ha apuntado que el tramo "hay que hacerlo con las máximas garantías para el vecindario".

El recorrido planteado no agrada a los vecinos y vecinas de las urbanizaciones afectadas, que han manifestado su preocupación por el proyecto. El Ayuntamiento de Olesa de Montserrat ha mantenido y sigue manteniendo reuniones con el vecindario del Mas de les Aigües y Casa Blanca para mantenerles informados sobre el avance del proyecto. En este sentido, Serradó expresa el desacuerdo del Ayuntamiento ante el trazado por el que ha optado el equipo redactor, ya que "causa un fuerte impacto en el vecindario de la zona y se pierde la oportunidad de poner en valor el meandro del río Llobregat".

UNA OPORTUNIDAD PARA RECUPERAR PATRIMONIO

Aparte de la revalorización de los meandros y el entorno natural del río Llobregat, el proyecto de las Vías Azul supone una gran oportunidad para recuperar un elemento clave de la historia y el patrimonio industrial olesano: el puente de la Palanca. 

Esta construcción quedó destrozada tras las catastróficas riadas de 1971. La Diputación se ha comprometido a trabajar en la recuperación de la Palanca de forma totalmente independiente al recorrido, anunciando el inicio de las obras para 2026. Marc Serradó lo ve como en "una buena noticia para Olesa, Esparreguera y por la Colònia Sedó, que podrá ver un impulso en su actividad económica".

El proyecto conocido como Vies Blaves es una infraestructura impulsada en 2015 por la Diputación de Barcelona, formada por 306 kilómetros de caminos peatonales y ciclistas que transcurre paralela a los cauces de los ríos Llobregat, Anoia y Cardener, y que supondrá una inversión de 45 millones de euros con cargo a la Diputación. 

Este recorrido transcurre 10 km por el término municipal de Olesa de Montserrat en el que actualmente conocemos como "Camino del río", que se inició en 2016, gracias a un proyecto desarrollado por el Ayuntamiento, pero quedó parado. Desde entonces, el consistorio olesano sigue reclamando una inversión que permita acabar de conectar la capital catalana con Montserrat.