CC.OO. vuelve a la huelga convocada por los trabajadores de la administración tributaria de la Diputació

Después de dos reuniones, CC.OO. en el Organismo de Gestión Tributaria (ORGT) de la Diputació de Barcelona "ha constatado que el organismo no está dispuesto a restablecer el perjuicio económico y laboral que ha provocado el personal de gestión y recaudación tributaria con el incumplimiento los pactos y acuerdos de los últimos años", ha denunciado en un comunicado, asegurando que regresa al paro convocado para este 4 de amyo.

La plantilla acordó por unanimidad continuar con las movilizaciones si la Corporación no garantizaba el cumplimiento de los acuerdos de valoración y reclasificación profesional que debían estar implementados en enero de 2017. De hecho, este sindicato no participó en el paro convocado para el pasado 26 de abril donde sí asistieron los miembros de UGT al considerar que en las reuniones no se produjo ningún hecho destacable para desmovilizarse.

Ahora, Comisiomes vuelve a la calle para recordar que el reconocimiento de los trabajadores del ORGT es un punto capital para iniciar las negociaciones para la integración de los empleados del organismo autónomo a la plantilla de la Diputació de Barcelona.

Los sindicatos recuerdan ya que esta integración no debe suponer ningún perjuicio ni "ningún nuevo incumplimiento por parte de una Corporación que ha sido incapaz de cumplir los pactos laborales firmados con el anterior presidente, Sr. Salvador Esteve Figueras" subrayan desde CC.OO.

Este sindicato ha manifestado en un comunicado que quiere un compromiso firme de la presidenta Mercè Conesa y de todos los grupos políticos de la Diputació de Barcelona que garantice el cumplimiento de los acuerdos pasados y futuros, sea cual sea el resultado en las elecciones municipales que se celebrarán de aquí a un año.

Pese a que este 4 de mayo es el último día de la huelga tal y como estaba convocado los sindcatos no descartan más jornadas de movilización y paros si no se resuelve el conflicto y que, aseguran, "está teniendo un gran impacto en el servicio tributario" que se ofrece a cerca de 300 ayuntamientos de la provincia de Barcelona , "con el seguimiento masivo de una plantilla de 700 personas".