Los trabajadores de la planta de Nissan de Sant Andreu logran un acuerdo sobre el convenio

La dirección de Nissan y los representantes de los trabajadores han alcanzado un acuerdo sobre el nuevo convenio colectivo de la planta de la firma de automoción en Sant Andreu de la Barca, convirtiéndose en el primer convenio de la compañía al que se acogerán los empleados de este centro desde que la factoría pasara en 2016 a ser propiedad de la automovilística.

El convenio será efectivo desde el pasado 1 de abril hasta el 31 de marzo de 2021, y fija unos incrementos salariales del 1,5%, 2,5% y 2% consolidables respectivamente para los años 2018 (con efectos entre el 1 de abril de 2018 y el 31 de marzo de 2019), 2019 (1 de abril de 2019 - 31 de marzo de 2020) y 2020 (1 de abril de 2020 - 31 de marzo de 2021).

Introduce medidas de flexibilidad como que la jornada industrial podrá establecerse entre un mínimo de 219 días y un máximo de 227, en función de las necesidades productivas previstas para el año natural de que se trate.

HORAS FLEXIBLES

También establece una bolsa de horas flexibles de 30 horas anuales por trabajador que permitirán ampliar o reducir la jornada diaria, por necesidades de la producción, hasta un máximo de dos horas en cada día laborable en que se haga uso de esta medida y con el límite de seis horas semanales.

Se ha acordado la adhesión al Plan de Igualdad de Nissan Motor Ibérica, incorporando los permisos y licencias recogidos, así como la regulación en formación continua de los trabajadores en línea con lo establecido por el Real Decreto que regula el Sistema de Formación Profesional para el Empleo en el ámbito laboral.

La directora de Recursos Humanos de Nissan Motor Ibérica, Gemma Fernández-Nespral, ha destacado que el acuerdo permite mantener a la compañía dentro de los márgenes de competitividad necesarios y "seguir mejorando la posición de la planta dentro de la Alianza".

La planta de bastidores y suspensiones en Sant Andreu de la Barca cuenta con 42.000 metros cuadrados de superficie, y su incorporación a Nissan Motor Ibérica en 2016 permitió a la compañía mejorar su competitividad al internalizar un suministro esencial para la fabricación de las pick up Nissan Navara, Renault Alaskan y Mercedes-Benz X Class que se producen en la planta de Zona Franca.