AMB y Govern multiplican por diez la inversión en el saneamiento del agua del área metropolitana
La inversión tiene como objetivo mejorar las siete depuradoras del área metropolitana e impulsar nuevas acciones que afectarán a las plantas del Baix Llobregat, entre otras.
El conseller de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat, Damià Calvet, y el vicepresidente de Medio Ambiente del Área Metropolitana de Barcelona (AMB), Eloi Badia, han presentado la inversión de 144 millones de euros que el Govern realizará en saneamiento del agua del área metropolitana en los próximos cinco años.
En rueda de prensa conjunta, Calvet ha detallado que esta inversión es diez veces mayor que la del anterior plan quinquenal (que fue de unos 14 millones) debido a que la Agència Catalana del Aigua estaba en fase de "saneamiento", y ha subrayado que la agencia tiene actualmente una deuda de 160 millones.
La inversión tiene como objetivo mejorar las siete depuradoras del área metropolitana e impulsar nuevas acciones: en 2019 se destinarán 12 millones a mejoras, y de 2020 a 2023 esta inversión aumentará a los 16,5 millones al año, lo que suma 78 millones de los 144.
Según Badia, los 66 millones restantes se destinarán a nuevas infraestructuras y a la actualización tecnológica de depuradoras; acabar de conectar todo el sistema de saneamiento metropolitano para mejorar el rendimiento de la red; trabajar en la reducción de los olores y "poner al día" los colectores.
En lo que respecta al Baix Llobregat, Badia ha puntualizado que entre las mejoras y trabajos que van a llevar a cabo es resolver los olores generados por las plantas depuradoras que afectan a Gavà y Viladecans. Y mejorar el sistema en la desalinizadora de El Prat de Llobregat
Calvet ha dicho: "Tenemos situación saneada que nos permitirá desde el ACA hacer las inversiones", y ha recordado que en el AMB viven 3,2 millones de personas (cerca del 50% de la población de Catalunya) y concentra el 51% de la producción del PIB y de la fuerza laboral catalana.
Ha insistido en que las inversiones y planificaciones en gestión del agua deben ser constantes debido a la adaptación tecnológica, el cambio climático y la aparición de nuevos residuos, y además ha destacado la necesidad de coordinación entre administraciones y ha pedido colaboración ciudadana por la sostenibilidad.
También Badia ha apostado por un AMB más "resiliente y sostenible" que pueda abordar los efectos del cambio climático y contribuir al necesario equilibrio medioambiental: "Esta inversión es un ejemplo de que el saneamiento, la salud y el Medio Ambiente están íntimamente relacionados".
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