El sector ferroviario alerta de los "riesgos para la seguridad" causados por los sabotajes independentistas

Desde que se diera a conocer la sentencia del procés los sabotajes a la red ferroviaria catalana ha sido una constante prácticamente diaria. Hace dos días, la propia Renfe lamentaba que ya en 15 días había registrado hasta 30 incidencias.

Todo esto está afectando de lleno a los usuarios del transporte, obviamente, pero también a los trabajadores que no saben con qué se pueden encontrar cuando inician su jornada laboral. CC.OO. y UGT, como sindicatos más representativos dentro del Sector Ferroviario de Catalunya, viendo la situación se han dirigido a las diferentes Administraciones, organizaciones políticas, entidades sociales y a la ciudadanía catalana para pedirles calma y ayuda.

Los empleados del sector ferroviario subrayan que estos actos de sabotaje "ponen en grave peligro la vida de los trabajadores ferroviarios y de los usuarios, en su mayoría trabajadores que realizan sus viajes para ir al trabajo" y alertan de que "se están dando las condiciones para un accidente grave que todos lamentaremos".

Sin meterse en los aspectos políticos que se supone que hay detrás de estos actos, los sindicatos han hecho un llamamiento "a la reflexión y la cordura para que los autores de estas acciones desistan de su actitud temeraria".

Por otro lado, los sindicatos del sector ferroviario catalán ha pedido a la Generalitat y al Ministerio de Fomento que "denuncien estos hechos y pongan en marcha todas las actuaciones necesarias para evitarlos". 

Esta demanda llega por la necesidad de "garantizar la seguridad de las personas" y es que, como recuerdan los trabajadores, el tiempo de reacción segura ante los obstáculos en la vía y su zona de influencia es muy reducido, por causa de los trazados sinuosos y las arboledas de la mayoría de las líneas ferroviarias catalanas, y por el peso elevado de los trenes, que necesitan mucho espacio de frenado

Por último, el sindicato recuerda que "el transporte ferroviario disfruta de una baja tasa de accidentabilidad", algo que le confiere un valor añadido por lo que "merece una mejor atención y respeto por parte de todos".