A veces el verano hace honor a su estacionalidad y se recalienta con peleas mediáticas que merece la pena observar, y sobre todo seguir, porque, sin la menor duda, esconden lo mejor de nuestra agitada profesión de periodistas. La guerra de Pablo Iglesias contra nuestro colega Eduardo Inda, lejos de amainarse, ha entrado en una especie de batalla de las Ardenas, en la que, como Vds., saben, los nazis comenzaron ganando, pero que entre el estadounidense Patton y la mejoría del tiempo y con ella el trabajo de la aviación, los aliados acabaron saliéndose con la suya acabando con las últimas esperanzas de Hitler y los suyos, como ahora mismo parece que está pasando bajo la diligente gestión del Juez Manuel Garcia Castellón.
Hoy me leo el artículo del propietario de OK diario titulado “Iglesias, eres un delincuente”, y tras hacerlo, no me queda la menor duda, de que la batalla ha entrado en la fase más decisiva. Aquí ya no hay medias tintas, o el líder de Podemos acaba judicialmente empapelado, con lo que eso supone para su formación y su futuro político, e incluso para el Gobierno SÁNCHEZ y su ex Ministra de Justicia y Fiscal General, o vamos a tener un gravísimo problema de Estado por la presunta manipulación de la independencia judicial si se trata de echar tierra encima del asunto.
Como, por experiencia, en este diario sabemos hasta latín, por eso nos han dado tanto, sobre otro asunto tan turbio como lo sigue siendo el Caso Inipro, que nunca acaba de juzgarse porque un miembro de la actual ejecutiva del PSOE es alcalde socialista de Viladecans, amén de reconocido sanchista y ahora pactante podemita y ha jugado a dilatar cuantos procesos o trabajos de la Guardia Civil ha llevado a cabo, haciéndosela palmar judicialmente a sus propios colaboradores que actúan como ingenuos testaferros, observamos con esperanza esta pelea madrileña, con la secreta esperanza de que el periodismo pueda, por fin, contra el juego sucio político, y sobre todo, con aquellos , que presumen de líderes honrados y luego, son lo que son, cada vez que Jueces como Castellón tiran un poco de la manta a instancias de los medios independientes.
La verdad es que lo que me he leído hoy 28 de junio, me ha alegrado mi cumpleaños, que coincide en la fecha con lo publicado. Por eso, brindo por la victoria final y una derrota en toda regla de quien no cuenta una sola verdad, ni en el Congreso, ni en el Gobierno, ni tampoco en los medios afines y encima ha atesorado un patrimonio familiar insuperable, en un corto espacio de tiempo.
Hay un viejo proverbio judío que a mí me reconforta cuando pasan cosas como ésta que le hemos contado: “Con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanzas de volver”.
¿Y si la frase, ahora más que nunca se hace viral?
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