El Vilabús de Viladecans transporta a cerca de 9.000 viajeros a la playa

El Vilabús, el autobús que une el casco urbano de Viladecans con la playa, ha sido utilizado por 8.941 usuarios desde que entró en funcionamiento el 15 de junio al 22 de julio, según datos de la empresa Avanza, gestora de este servicio municipal de transporte público. Los usuarios han evitado así tomar vehículo privado y han apostado por la comodidad y la sostenibilidad para hacer los 5 km que separan el centro de la ciudad con su playa. El servicio permanecerá en activo hasta el 11 de septiembre.

El VB4 sale cada hora en punto entre las 10 y las 20 horas (menos a las 15 horas) desde la avenida Josep Tarradellas hacia las playas de Viladecans. Hace varias paradas, una de ellas en la carretera de la Villa-Centro Comercial, muy cerca de la estación del tren para dar servicio a los visitantes que vienen de fuera. En sentido contrario, sale cada hora desde el aparcamiento de la Murtra o la gasolinera entre las 10.30 y las 20.30 h, menos a las 15.30 h. 

Este año el Vilabús ha incorporado una nueva parada más cerca de la playa en los días laborables. De lunes a viernes, el autobús llega hasta el estacionamiento de la Murtra, mientras que los fines de semana y festivos la parada se mantiene frente a la gasolinera. 

El motivo que aquí se mantenga sábados y domingos son las retenciones de tráfico que se generan en el camino de acceso a la playa, lo que no permite garantizar la frecuencia de paso. Por otro lado, el autobús es gratuito los fines de semana para hacerlo más accesible a la ciudadanía. Una media de 311 personas han subido al Vilabús los fines de semana de junio y julio. 
 

Apostar por el transporte público es una de las mejores alternativas para acceder, ya que el aparcamiento está regulado para gestionar la movilidad y los fines de semana es difícil encontrar sitio. El precio del aparcamiento para coches censados en Viladecans es de un euro y para el resto de vehículos, el precio es de seis euros, todo el día.

La playa de Viladecans es la favorita de los bañistas metropolitanos, que le han otorgado una nota de 8,08 puntos sobre un máximo de 10 según el último estudio de ocupación y satisfacción de playas realizado por el Institut Metròpoli. Los aspectos más apreciados por los visitantes son el acceso a las playas, el paisaje y el entorno, la proximidad y la tranquilidad.