​¿Queremos o no separación de poderes?

A QuimTorra se le ha vuelto a notar la cara más intolerante y supremacista de su muy escasa carrera política. No lleva bien lo del juicio del Supremo, y se le nota demasiado que sobre la separación de poderes no tiene ningún interés en saber nada, como si su proyecto de Estado caminase hacia el tercer mundo, donde justicia y poder político son lo mismo, porque allí lo que se practica es lo de "o estás conmigo, o estás contra mí".

Ayer, en lugar de reconocer que ha hecho una pésima gestión de Gobierno, como ya mostró a su paso por Sitges ante todos los empresarios que fueron a escucharle, se enrocó en la represión, palabra de uso fácil y continuó entre los procesistas, acusando a los socialistas de lo que no pueden hacer, que es decirle a unos fiscales de qué tienen que acusar o no. Bastante metedura de pata ha sido ya colocar a una Abogada del Estado en un juicio, en el que la acusación pública le ha dado mil vueltas, dejándola en el ridículo más espantoso ante la ciudadanía y la Sala. Solo por eso, Torra debería haber enmudecido y esperando la sentencia de un Tribunal que todavía no la ha emitido.

Y como todo el mundo se ha vuelto loco y lo que se quiere es ganar la absolución a través de un juicio paralelo, hoy las defensas han ido a Catalunya Radio a poner a parir a quien no esté de acuerdo con sus tesis, con tal de amedrentar al Supremo en pleno relato de la causa. Así les irá a los que hacen estas tonterías y de poco valdrán las palabras de clemencia que hemos pronunciado muchos en busca de una solución benigna para los que los fiscales acusan de haber dado un golpe de Estado. A veces, la incompetencia profesional se disimula haciéndose las víctimas.

Un día de estos, con sosiego y honradez, alguien nos contará el porqué de los hechos vividos  para que todos podamos aceptarlos con normalidad democrática. Mientras tanto, escuchemos a Torra y sus desvaríos y sobre todo al profeta de Waterloo, que es el artífice principal de este monumental enredo. Con sus palabras nos desahogaremos a gusto.

Artículo original publicado en catalunyapress.es.